Receta de lasaña italiana
Plato: Pasta
Cocina: Italiana
Dificultad: Media
Raciones: 8 raciones
Calorías por ración: 730 kcal
Tiempo total: 4 horas y 10 minutos
INGREDIENTES PARA LASAÑA
Para la salsa de tomate
2 latas grandes de tomate triturado
2 latas de tomate concentrado
1 cucharada de postre de sal
1 cucharadita de café de azúcar
12 hojas de albahaca
1 cucharada de postre de orégano seco
1 cebolla
1 cucharada de postre de margarina
1 cucharada sopera de aceite de oliva
1 cucharadita de pimienta negra molida
Para montar la lasaña de carne
2 paquetes de pasta de lasaña precocinada
1 kilo de carne picada de ternera
200 gr de mortadela
200 gr de queso rallado
3 huevos
2 cucharaditas de sal
2 cucharadas sopera de mantequilla
1 cucharada de postre de margarina
1 cucharada sopera de aceite de oliva
CÓMO PREPARAR LASAÑA
Empieza esta receta preparando la salsa de tomate. Para ello corta una cebolla en trozos pequeños. Asegúrate de que quede bastante picadita.
Pon una cazuela al fuego y añade el aceite de oliva y la mantequilla. Cuando esté caliente, sofríe la cebolla a fuego medio durante 5 minutos.
Añade la sal y la pimienta negra molida. Deja cocinar unos 2 minutos más.
En ese misma cazuela, agrega el tomate triturado. Puedes usar en su lugar tomate maduro rallado si lo prefieres, pero yo te recomiendo utilizar tomate triturado.
Agrega también el tomate concentrado. Este tipo de tomate, una vez cocinado, le aportará un color más oscuro a la salsa y un sabor mucho más intenso.
Añade la sal y el azúcar, que se utiliza para restar acidez a la salsa de tomate.
Tapa la cazuela dejando un pequeño espacio en un lateral para que vaya saliendo el vapor. Cocina la salsa de tomate durante al menos 3 horas a fuego muy lento y remueve de vez en cuando. Si ves que queda muy seca, añade un poco de agua a la salsa.
Un consejo: cocina la salsa de tomate en una cazuela o en una olla alta. El tomate cuando se cocina salpica bastante, usando una cazuela u olla alta, evitarás muchas salpicaduras y quemaduras.
Pon agua con sal en otra olla pequeña y cuece los huevos durante 10 minutos. Una vez cocidos, ponlos en agua fría y déjalos así unos minutos hasta que se enfríen.
Ahora derrite la mantequilla en una sartén y añade el aceite de oliva.
Cuando esté caliente, agrega la carne picada y cocínala a fuego medio unos 6 minutos.
Añade pimienta negra molida y sal. Remueve para que las especias se integren bien con la carne y cocina 2 minutos más. Pasado ese tiempo, reserva la carne en un plato hasta montar la lasaña.
A continuación cuece la pasta. Para ello, pon una olla con agua al fuego y añade sal y margarina. Cuece la pasta el tiempo que se indica en el envase, pero asegúrate que quede al dente. Ten en cuenta que la lasaña italiana se seguirá cocinando en el horno y no queremos una lasaña pasada de cocción.
Una vez cocida la pasta, escurre bien de agua y pásala a un bol con agua fría. Déjala unos minutos hasta que se enfríe del todo. Mientras tanto, pela los huevos y córtalos en trozos pequeños. Corta también la mortadela en trozos pequeños.
Cuando la pasta esté fría, extiende un paño de cocina sobre el mármol y pon la pasta encima para quitarle el exceso de agua.
Echa un ojo a la salsa de tomate, rectifica de sal si fuese necesario. La salsa debe quedar bastante espesa. Cuando falten 10 minutos, añade las hojas de albahaca enteras y el orégano seco. Remueve para mezclar bien y termina de cocinar.
Escoge una bandeja para montar la lasaña casera que sea apta para el horno. Pincela la bandeja con un poco de mantequilla.
Pon una capa de salsa de tomate en el fondo. Cubre la capa de salsa con una capa de pasta. Coloca la hojas de pasta ligeramente superpuestas.
Extiende una capa de carne picada encima de la pasta.
Y encima de la carne añade salsa de tomate, el huevo duro picado y la mortadela troceada. Termina con una capa de queso rallado.
Sigue haciendo capas en este orden y finalmente termina con una capa de pasta cubierta de salsa de tomate.
Cubre la fuente con papel de aluminio. Mete la fuente en el horno precalentado a 180ºC y cocina unos 25-30 minutos.
Pasado ese tiempo, saca la bandeja del horno y enciende la función de grill del horno. Cubre la superficie de la lasaña con queso rallado y un poco de mantequilla en forma de dados. Gratina unos 5 minutos o hasta que quede dorada a tu gusto.
NOTA
Puedes darle un sabor picante a la lasaña italiana añadiendo guindilla a la salsa de tomate. También puedes ponerle aceite picante cuando la sirvas en la mesa. Para hacer aceite picante en casa solo tienes que poner guindillas en un bote de cristal pequeño y cubrirlas con aceite de oliva. Guardar en la nevera y dejar macerar varios días antes de su uso. Este aceite de picante también te sirve para otros platos como pizzas y carnes.
Consejos para preparar Lasaña italiana
Para mejorar el sabor de la lasaña italiana ten en cuenta estos consejos que te dejo a continuación.Cuando pongas la pasta a cocer, añade una cucharadita de mantequilla o margarina al agua. A diferencia del aceite, que queda separado del agua, la mantequilla se integra y ayudará a que la pasta no se pegue.
Cuando cocines la pasta, procura que quede al dente. Ten en cuenta que luego la lasaña de carne va al horno y se seguirá cocinando.
Cuando cocines la carne picada, pon mitad aceite de oliva mitad mantequilla. Le aporta sabor a la lasaña boloñesa y además ayuda a que se solidifique una vez se enfríe.
La lasaña italiana se puede congelar. Monta la lasaña en una fuente apta para horno y cúbrela bien con papel film. Da varias vueltas de film para que no se rompa y el frío queme la lasaña.
Cuando vayas a descongelarla, déjala fuera a temperatura ambiente. No la metas directamente en el horno porque con el contraste de temperatura la lasaña soltará mucha agua.
Una vez descongelada del todo, métela en el horno tapada con papel de aluminio. Calcula 20 minutos a partir de que veas que empieza a burbujear por el calor. Después de ese tiempo, gratina con un poco de queso y mantequilla por encima.
La lasaña italiana es un plato tan completo que sirve de plato único. Pero puedes acompañarlo de algún entrante ligero o algún entrante más elaborado.
Las brochetas de melón con crujiente de jamón son una opción muy ligera para acompañar a la lasaña junto con los champiñones rellenos.
Otra opción es la tapa española estrella, las croquetas. Puedes preparar unas croquetas de jamón ibérico o croquetas de cocido y servirlas de aperitivo.
La lasaña lleva huevo duro en el relleno. Puedes aprovechar y poner a cocer más cantidad de huevos para preparar unos huevos rellenos.
Como picoteo el tartar de salmón y el tartar de fuet son ideales para acompañar la lasaña.
¡Buen provecho, familia!