Estoy haciendo algunas pruebas para decidir el menú de Nochebuena. Hoy le ha tocado el turno al cordero lechal y el resultado me ha gustado
Compré 3 paletillas de lechal y pedí que dieran un golpe en el hueso: no quedan tan bonitas pero se acomodan muy bien en la cubeta de mi crockpot de 5,7 litros. Incluso habría espacio para una más.
Untamos la cubeta con aceite de oliva virgen extra. Frotamos las paletillas con unos dientes de ajo pelados. Mezclamos sal rosa del Himalaya con aceite de oliva haciendo una pasta; con las manos untamos las paletillas y las ponemos en la cubeta
Programamos 8 horas en baja. Hacia la mitad del tiempo regamos con el caldo del fondo
Y seguimos el asado. Si quieres riega una segunda vez a falta de un par de horas
Puedes dejar en mantenimiento de calor y servir acompañado del jugo que han soltado
Me gusta mucho acompañar el cordero con una ensalada de lechuga y cebolleta fresca recién cortada. El aliño un buen chorro de aceite de oliva virgen extra, sal maldom y unas gotas de vinagre blanco.
A falta de alguna prueba más, este plato sale bien y es cómodo y limpio. El cordero queda súper jugoso y no hacen falta golpes de horno para conseguir el dorado final, la cerámica de la cubeta y la grasa de la pieza hacen milagros.
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