DIFICULTAD: Fácil.
TIEMPO DE PREPARACIÓN: 10 minutos.
INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS:
- Ocho lonchas de jamón de york
- Ocho lonchas de queso.
- Cuatro huevos.
- Ocho rebanadas de pan de molde.
- Aceite y mantequilla.
PREPARACIÓN:
Empezamos untando un poquito de mantequilla en el pan de molde. Es solamente para que no se pegue a la sartén, no os paséis que si no quedará muy grasiento. Ponemos el fuego alto y tostamos el pan por uno de los lados. Cuando le damos la vuelta, ponemos dos lonchas de queso y dos de jamón de york por encima de una de las rebanadas del sandwich para que vayan cogiendo temperatura y se vaya derritiendo el queso.
Cuando el pan esté listo, lo sacamos de la sartén y a la rebanada superior le hacemos un agujero en el medio de 5 ó 6 centímetros de diámetro con ayuda de un cuchillo, que nos servirá para dejar la yema del huevo a la vista y que no se explote al cerrar el sandwich. El trozo de pan que cortamos lo guardamos, que vendrá genial para untar la yema al comerlo.
En una sartén aparte freímos un huevo (que no se explote la yema, por favor) y lo sacamos, escurriendo bien todo el aceite. Lo situamos encima del sandwich y cerramos con la rebanada agujereada. Esperamos un par de minutos para que el calor del huevo acabe de derretir el queso... y a disfrutarlo! Como veis es muy sencillito, sin embargo se agradece el comer cosas fáciles pero diferentes. Que os aproveche!
Ya sabéis, si os gusta la receta o tenéis alguna sugerencia, dejadme un comentario. Gracias! ;)
Fuente: este post proviene de Las recetas de Charles, donde puedes consultar el contenido original.
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