Ingredientes:
Carne picada mitad cerdo mitad ternera (500 gr)
Arroz de grano corto -yo he usado bomba- (50 gr)
Cerdo ahumado -panceta, costillas…- (150 gr)
Cebolla (1)
Tomate (50 gr)
Sal (al gusto)
Pimienta (al gusto)
Pimentón dulce -paprika- (1 cucharadita)
Hierbas aromáticas frescas -menta, romero, tomillo, cebollino, eneldo…- (al gusto)
Chile picante (al gusto)
Aceite de oliva (3 cs)
Vinagre suave (1 cs)
Preparación:
Retira el pedúnculo a la col y saca las hojas tratando de no romperlas demasiado.
Cuece las hojas en agua con un hervor suave con un chorro de vinagre.
Una vez ablandadas sácalas a un plato con papel absorbente para que suelten la mayor parte del agua que les quede.
Retira las partes duras de las hojas con el cuchillo y pícalas menudas. Resérvalas.
Pela y pica la cebolla muy menuda.
Pela los tomates, retira las semillas y el agua y pica la pulpa muy menuda. Reserva.
Pica muy menudo las hierbas (retirando los tallos más leñosos) y el chile (retirando el pedúnculo). Reserva.
Pica la panceta ahumada tras retirarle la corteza y los trozos de cartílago. Reserva.
Sofríe la cebolla en un poco de aceite a fuego medio.
Cuando la cebolla esté sofrita añade el pimentón dulce y una cucharada grande de tomate (que puede ser frito o crudo). Mezcla.
En un bol prepara el relleno mezclando muy bien la carne de tenera con la de cerdo, sal, pimienta, el refrito de cebolla y tomate con pimentón, el bacon (panceta ahumada), la mezcla de guindilla (chile picante) picada con las hierbas frescas y parte de las partes duras de las hojas picadas menudas. Pon también el arroz.
Estira las hojas de col, pon una cucharada del relleno en El Centro y enróllalas cerrándolas por los lados para que no se salga el relleno.
En el fondo de una olla coloca las hojas más rotas o que no hallas rellenado.
Coloca también un poco de las partes duras de las hojas picadas.
Coloca ordenadamente sobre esto los rollitos de col rellena.
Haz cuantas capas de rollitos quieras y cubre con más trocitos de la parte dura de las hojas y un poco de salsa de tomate.
Cubre todo el contenido de la olla con caldo.
Tapa y deja cocer a fuego lento durante una hora.
Pasado este tiempo destapa y si hubiera caldo deja que evapore casi totalmente cuidando de que no se seque totalmente y se te queme la preparación.
Sirve.
Nota:
Lo tradicional es acompañar los sarmale de polenta y crema agria (crème fraîche)
Procura sacar las hojas de col cuidando que no se rompan.
Cuece las hojas de col en agua hirviendo con un poco de vinagre hasta que se ablanden lo suficiente para poder hacer los pollitos.
Corta las partes más duras de las hojas y pícalas en trocitos pequeños.
Por una lado tengo las hojas suficientemente blanditas como para poder hacer rollitos.
Por otro lado tengo las partes duras de las hojas de col bien picadas para usarlas más tarde en la preparación.
En una sartén con un poco de aceite de oliva sofrío una cebolla picada.
Cuando la cebolla esté mochada añade el pimentón y el tomate.
Ya está el refrito listo para añadir al relleno de los rollitos.
Una guindilla (chile picante), hierbabuena, romero, tomillo y cebollino. Usa las hierbas frescas que tengas por casa.
Yo voy a incluir a la masa del relleno unas lonchas de bacon (panceta ahumada) picada.
Comienzo el relleno poniendo en un bol mitad de carne picada de cerdo y mitad de ternera y salpimiento.
Le incorporo el sofrito de cebolla con pimentón y tomate.
Incorporo también el bacon picado.
Le añado una parte del picado que había reservado de las partes más duras de las hojas.
Le añado el picado de guindilla e hierbas frescas.
Por último añado un poco de arroz de grano corto (bomba).
Se mezclan bien todos los ingredientes.
Se coloca una cucharada sopera de relleno en el centro de cada una de las hojas.
Se cierra el rollito de col.
Pongo algunas de las hojas al fondo de la cazuela.
También pongo un poco de las partes más duras de las hojas que tenía picadas.
Coloca tantas capas de rollitos de col como quieras haciendo capas.
En la parte superior pongo más picado de la parte dura de la col.
La última capa es de salsa de tomate que puede ser frito o pulpa de tomate crudo.
Cubro con caldo que en este caso es de haber cocido unas costillas pero puede ser de pollo, de verduras o simplemente agua.
Una hora a fuego lento y con la tapadera puesta.
Un rato más a fuego lento y sin la tapadera cuidando que no se seque del todo y se queme la parte inferior de nuestra preparación.
Lo tradicional es acompañar estos pollitos de col rellenos con crema fresca (crème fraîche) y polenta.
Resulta un plato muy rico y agradable mucho más ligero de lo que parece en un principio.