Esta semana hemos querido hacer un postre irresistiblemente rico e irresistiblemente bonito, con flores y colores vivos. Porque necesitamos que la primavera venga ya, que el invierno se despida hasta el año que viene y que vuelva el solecito y el buen tiempo a nuestras vidas. Primavera, si me estás leyendo, vente ya y zámpate un trozo de esta TARTA DE CHOCOLATE NEGRO Y DULCE DE LECHE.
Esta tarta la hice para celebrar el nacimiento de Martina, el bebé con el pelo más moreno y más largo que he visto nunca. Guapa desde el momento cero, así que no queremos ni pensar hasta dónde puede llegar según vaya creciendo. Para ella y para sus papis, Marina y Pablo, va dedicada esta tarta.
INGREDIENTES (3 moldes de 18 cm):
ELABORACIÓN:
1. Mezcla el azúcar con el aceite en un bol. Al no llevar mantequilla, puedes hacer la receta directamente a mano con una varilla, aunque también puedes usar tu robot de cocina o unas varillas eléctricas.
2. Añade los huevos de uno en uno.
3. Tamiza la mitad de la harina, el cacao y la levadura sobre la mezcla e intégrala bien.
4. Vierte la mitad de la leche. Al ir añadiendo en varias veces los ingredientes secos alternados con la leche, te será más sencillo conseguir una masa homogénea y sin grumos.
5. Incorpora el resto de ingredientes secos y la leche restante.
6. Añade el aroma de vainilla.
7. Por último, vierte el agua hirviendo. Quedará una masa muy líquida, pero no te preocupes porque eso ayudará a que el bizcocho quede muy muy tierno y jugoso.
8. Engrasa los moldes y precalienta tu horno a 180ºC. Reparte la masa por igual usando una cuchara de helado o a ojo, como te resulte más sencillo.
9. Hornea durante 25 minutos a 180ºC o hasta que al pincharlos con un palillo, éste salga limpio.
10. Una vez horneados, déjalos enfriar sobre una rejilla antes de desmoldarlos para evitar que se rompan.
GANACHE DE CHOCOLATE NEGRO:
INGREDIENTES:
Como se trata de una ganache para cobertura, en el caso del chocolate negro, tienes que poner el doble de chocolate que de nata (crema de leche). Con otros tipos de chocolate, las proporciones también variarían.
ELABORACIÓN:
1. Pon la nata (crema de leche) a hervir en un cazo.
2. Cuando empiece a hervir, viértela directamente sobre el chocolate negro troceado muy finamente. Esto te ayudará a que se emulsione mejor y no queden trozos sin fundir.
3. Deja reposar un par de minutos para ayudar a que el calor de la nata (crema de leche) vaya fundiendo el chocolate.
4. Remueve hasta que emulsione perfectamente y no queden trozos de chocolate.
5. Cubre con film transparente y deja reposar a temperatura ambiente un par de horas hasta que adquiera la textura de una crema de chocolate. Si la dejas demasiado tiempo o la introduces en el frigorífico, la masa quedará con una textura demasiado dura y habría que darle unos golpecitos de calor en el microondas poco a poco para que adquiera la textura perfecta.
CREMA DE DULCE LECHE:
INGREDIENTES:
ELABORACIÓN:
1. Pon la nata (crema de leche) y el dulce de leche en un bol.
2. Bate con unas varillas hasta que le mezcla monte y esté firme. Deja reposar en el frigorífico cubierta con film transparente hasta que tenga una textura consistente.
MONTAJE DE LA TARTA:
1. Para que el bizcocho quede más jugoso aún, prepara un almíbar de vainilla llevando a ebullición 100 ml de agua y 100 g de azúcar blanco. Cuando hierva, añade una cucharadita de aroma de vainilla y deja enfriar un poco antes de almibarar los bizcochos.
2. Pon uno de los bizcochos sobre una base giratoria encima de un disco dorado o plateado para tartas.
3. Pinta con almíbar la superficie.
4. Rellena con la crema de dulce de leche. Lo puedes hacer usando la manga pastelera o una espátula.
5. Cúbrelo con el siguiente bizcocho y píntalo con almíbar.
6. Rellénalo de crema y vuelve a cubrir con el último bizcocho.
7. Cubre toda la tarta con ganache de chocolate usando la espátula e intentando que quede recta y con la misma cantidad de chocolate por todos los lados. Cubre primero los laterales y, por último, la parte superior. Para igualarla y alisarla, utiliza una paleta alisadora y una espátula.
TRUCO: para conseguir bordes perfectos, sumerge la paleta y la espátula en agua caliente, sécalas un poco y pásalas sobre la tarta. El calor hará que la superficie quede muy lisita.
8. Deja enfriar en la nevera durante 30 minutos. Con un cuchillo afilado, retira el chocolate de los bordes para conseguir un acabado perfecto.
9. Decora con unas rosas o con las flores que más te gusten y unas hojitas de fondant. Estoy preparando un tutorial sobre cómo hacer rosas tan bonitas y tan primaverales como las de esta tarta. Éstas están pintadas con colorante en polvo sobre la rosa de fondant blanco para darle mayor realismo.
El resultado final es esta tarta tan deliciosa, con bordes perfectos, con una decoración que pide a gritos a la primavera que se instale definitivamente para poder dejar atrás el frío y el mal tiempo.
Si te encanta el chocolate, ésta es tu tarta: jugosa, cremosa, con un sabor muy intenso, con el contraste del dulce de leche que le aporta esa chispa que hace de esta tarta un postre irresistible.
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Te espero la semana que viene con otra receta que ya estamos maquinando y después toca ponerse las pilas y hacer recetas de Semana Santa aprovechando que vienen días de fiesta.
Gracias por estar ahí siempre.
¡Un abrazote enorme!
Jon