La propuesta de hoy es una de esas recetas rápidas y que resulta muy resultona y rica. Una receta que podemos preparar con antelación y que es ideal para llevar a alguna reunión. Aunque parezca una quiche a simple vista, ésta no lleva masa quebrada en la base, sino hojaldre lo que, para mi gusto, aligera mucho el conjunto. Podéis añadirles los ingredientes que más os gusten en el relleno. Yo he optado por un relleno muy colorido, espárragos trigueros y tomates cherrys, aunque también lleva bacon y tomates secos. Yo prefiero tomarla caliente o tibia, pero está también perfecta fría, con el paso de las horas, éso vosotros lo decidís.
INGREDIENTES:
Un manojo de espárragos trigueros
Un puñado de tomates cherrys
Unos cuantos tomates secos
Unas lonchas de bacon
Una plancha de hojaldre comprada
250 ml. de nata (crema de leche) de cocinar
3 huevos
250 ml. de leche entera
100 gr. de queso rallado Enmental
Sal
Pimienta
PREPARACIÓN:
Hidratamos los tomates secos en agua caliente hasta que estén blandos. Ponemos una olla con agua salada y cuando empiece a hervir introducimos los espárragos limpios y sin la parte dura. Cocemos durante tres minutos. Sacamos y escurrimos. Mientras, estiramos el hojaldre sobre el molde rectangular, rizado y desmontable, quitando el sobrante de los lados pasando un rodillo por encima. Pinchamos con un tenedor y reservamos mientras el hojaldre en el frigorífico.
En un bol batimos los huevos, añadimos la leche y la nata (crema de leche), el queso rallado, removemos bien, salpimentamos. Añadimos el bacon en tiras y los tomates secos cortados también en tiras. Sacamos el molde del frigorífico vertemos la mezcla dentro. Y distribuimos por encima los espárragos y los tomates cherrys cortados por la mitad.
Introducimos en el horno precalentado a 180º durante 30 o 40 minutos, hasta que veamos que la mezcla ha cuajado, eso dependerá de la potencia de vuestros hornos. Sacamos, dejamos reposar unos diez minutos y servimos.
También podéis cambiarle el queso por el que más os guste, incluso quitarle el bacon y hacer la tarta totalmente vegetariana, incluso sustituir la nata (crema de leche) por leche evaporada, así quitamos calorías. Es una receta muy versátil que os hará quedar muy bien.
Feliz miércoles.
Lidia.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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