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Ingredientes:
397 gr de leche condensada2 limones600 ml de nata (crema de leche)10 hojas de gelatina 5 claras de huevo180 ml de leche 1 palo de canela en rama caun paquete de galletas de canela80 gr de mantequilla sin sal Empezamos preparando la base de nuestra tarta, para ello trituramos las galletas de canela y las mezclamos bien con la mantequilla derretida hasta obtener una masa con la que cubrimos la base del molde desmoldable donde haremos la tarta, dejamos en el frigorífico. Ponemos a fuego suave la leche con la cascara de un limón y una rama de canela, cuando rompa a hervir lo apartamos y dejamos el cazo tapado durante 10 minutos.
Hidratamos la gelatina en agua fría , colamos la leche y en esta disolvemos bien la gelatina, mezclamos con la leche condensada.
Montamos las claras a punto de nieve, antes de que termine de montar añadimos la ralladura de un limón y una cucharadita de canela, seguimos montando hasta que se mantenga firme; En otro cuenco, montamos la nata (crema de leche).
Agregamos las claras montadas al cuenco donde tenemos la leche y mezclamos con movimientos envolventes para que no se baje.
A continuación añadimos la nata (crema de leche), y repetimos la operación anterior.
Vertemos la mezcla en el molde reservado en el frigorífico y dejamos hasta que cuaje, mejor de un día para otro. Por último espolvoreamos de canela la superficie.
** Si no nos gusta la base de galletas de canela, podemos hacer un pequeño cambio, el cual he probado y queda también muy rico.
Sustituiríamos las galletas y mantequilla de la base por dos láminas de bizcocho, la primera la ponemos de base, añadimos sobre esta la mitad de la masa de la tarta, otra lámina de bizcocho y el resto de masa.