Para esta ocasión y aprovechando que estamos en época de frutas veraniegas, me he decidido a prepararos una deliciosa tarta con el melón como protagonista.
Y es que ir a la compra y no ver las montañas de melones que parecen decir: "Llévanos a casa, estamos dulces como el azúcar" es misión casi imposible.
Por lo que con un buen melón en la cesta de la compra marcharemos para casa a preparar una buena tarta para el postre, que seguro sera del gusto de todo el que la pruebe.
Vamos con la receta?
Ingredientes
Para la base:
4 huevos
120gr. de azúcar
1 cucharadita de azúcar vainillado o esencia de vainilla
120gr. de harina
Para el mousse:
800gr. de melón sin piel ni pepitas
el zumo de un limón
100gr. de azúcar
500gr. de nata (crema de leche) para montar bien fría
50gr. de azúcar glass
5 laminas de gelatina neutra
1 cucharadita de esencia de vainilla
colorante verde (opcional)
Elaboración
Base:
Precalentar el horno a 180º.
Con las varillas eléctricas batimos los huevos con el azúcar hasta que blanqueen.
Le agregamos la vainilla y seguimos batiendo. Le añadimos la harina tamizada y lo mezclaremos todo con una lengua de silicona con movimientos envolventes, hasta que veamos que está perfectamente integrado y sin grumos.
Cuando este todo bien integrado lo ponemos en la bandeja del horno, sobre un papel de horno para que desmolde fácil.
Lo metemos a 180º con calor arriba y abajo en la bandeja central del horno durante 8 minutos.
Esperamos a que enfríe para desmoldarlo. Lo cortamos con la medida del molde y ponemos como base para la tarta. Reservamos.
Mousse
Ponemos las hojas de gelatina sumergidas en un bol con agua muy fría, para que se hidraten. Las tendremos ahí al menos 5 minutos.
Troceamos el melón y lo ponemos en un bol junto al zumo de limón y el azúcar. Lo batimos todo y calentamos la mezcla en el microondas. No hace falta que llegue a hervir.
Escurrimos las hojas de gelatina y se las agregamos a la mezcla. Removemos hasta que se disuelvan completamente.
Si le vamos a poner colorante verde, se lo añadimos y mezclamos bien todo para que tenga una tonalidad uniforme. Dejamos templar y reservamos.
Montamos la nata (crema de leche), que debe estar bien fría, junto al aroma de vainilla. Cuando este semi montada, le agregamos el azúcar glass y seguimos batiendo hasta que monte firme.
Cuando la mezcla de melón este a temperatura ambiente, se la agregaremos a nuestra nata montada (crema de leche) y con movimientos envolventes, de abajo hacia arriba, iremos mezclándolo todo bien hasta que tengamos una mousse fina y sin grumos.
Vertemos la crema sobre nuestra base de bizcocho que teníamos reservada y metemos en el frigorífico al menos 4 horas, pero si queréis mejores resultados, mejor de un día para el otro.
Una vez reposada, desmoldar con cuidado y decorar a vuestro gusto.
Para obtener un resultado optimo con la tarta debéis utilizar melones de calidad. Yo para asegurarme de que me quedara de lujo utilice melones de la Huerta de Conil por cortesía de mis amigos
SCA Las Virtudes