Ingredientes:
Panela -azúcar de caña sin refinar- (200 gr) -0,44 libras USA-
Huevos (4)
Queso mascarpone (500 gr) -1,10 libras USA-
Nata (crema de leche) de montar -crema de leche de alto contenido en grasa- (400 gr) -0,88 libras USA-
Harina de trigo normal -de todo uso- (20 gr) -0,04 libras USA-
Sal (1 cucharadita de café)
Preparación:
Bate el azúcar con los huevos.
Incorpora el queso mascarpone y bate bien hasta que esté todo bien mezclado.
Añade la nata (crema de leche) y vuelve a batir.
Tamiza la harina y la sal sobre la mezcla y vuelve a batir hasta mezclar muy bien.
Moja un papel de horno en agua, estrújalo para que escurra el agua y forra con él un molde de horno desmontable de 20 cm de diámetro.
Rellena el molde con la masa.
Hornea a 200º C -392º F- durante una hora.
Los últimos 15 minutos debes vigilar. Si la parte superior se dora tápala con un papel de aluminio para que no quede demasiado hecha.
Deja enfriar la tarta.
Introdúcela en la nevera hasta el día siguiente.
Desmolda y sirve.
Yo he usado "panela", azúcar sin refinar obtenida de la caña de azúcar. Puedes usar otro tipo de azúcar.
Casca 4 huevos sobre el azúcar y bate muy bien.
Siempre que añadas algún ingrediente debes batir con energía para que quede todo muy bien mezclado.
Incorpora el queso mascarpone y vuelve a batir. También puedes cambiar el queso y usar por ejemplo Philadelphia.
Tras añadir el queso... a cerrar otra vez. Debe quedar así de bien mezclado. Puedes usar una batidora eléctrica para ahorrarte trabajo.
Incorpora la nata (crema de leche) de montar -crema de leche- y vuelve a batir.
Ya está casi todo el trabajo hecho.
Tamiza la harina de trigo, la de todo uso e incorpórala al bol. Añade también una pizca de sal.
Ya está lista la masa de esta deliciosa tarta de queso.
Moja un papel de hornear en agua. Escúrrele todo el agua que puedas y se adaptará al molde muy fácilmente.
Yo voy a utilizar un molde de 20 cm de diámetro que viene muy bien para las cantidades que doy en esta receta.
Con el horno a 200º C, esta tarta -para el tamaño de molde y cantidades que doy- debe estar una hora.
Vigila el horno. Si la tarta se dora demasiado puede llegar a quemarse. Yo los últimos 15 minutos la tapé con un papel de aluminio.
Tras sacar la tarta del horno la dejo enfriar y después la meto en la nevera durante algunas horas -toda la noche- antes de consumirla.
Resulta una tarta deliciosa. ¡Pruébala!.
Fuente: este post proviene de Blog de CocineroAndaluz, donde puedes consultar el contenido original.
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