Las brevas y los higos están inundando los mercados, y ¡nosotras lo estamos gozando! En los meses de verano nos regalan cestas llenas de higos, y la verdad, se agradecen. Son refrescantes y dulces, lo que los convierten en el postre o desayuno perfecto. Esta es la primera receta de higos de muchas, ¡solo estamos empezando!
Esta tarta es muy sencilla, el principal ingrediente es la crujiente masa quebrada, que resalta frente a la cremosidad del relleno y el dulzor de las brevas.
Tarta de queso y brevas
? Preparación: 20? (+20 minutos horneado)
? Raciones: 6
? Dificultad: baja
Ingredientes
Para el relleno:
400 ml de nata (crema de leche) muy fría para montar
200 ml de queso blanco para untar
100 gr de azúcar blanco (al gusto)
1 cucharadita de esencia de vainilla
10 brevas o higos
Para la masa quebrada:
250 gr harina
150 mantequilla fría en daditos
150 azúcar
1 huevo
1 pizca de sal
Receta
¡Empecemos!
Es muyyy sencillo de realizar, para comenzar tenemos que tener lista la masa quebrada. Para prepararla en un bol ponemos la harina y la sal, e incorporamos la mantequilla con la ayuda de las manos. Tenemos que conseguir una masa más o menos integrada, pero no uniforme. Por otra parte batimos un huevo y lo mezclamos a la masa. La masa no suele quedar pegajosa, le podemos añadir harina si lo vemos necesario. Para acabar con nuestra masa la hacemos una bola, envolver en film y meterla en la nevera durante 1 hora.
Cuando pase este tiempo, sacamos de la nevera. Espolvorear harina sobre la superficie de trabajo, y empezamos a trabajarla. Con la ayuda de un rodillo la estiramos hasta alcanzar el diámetro de nuestro molde de cocina. Cuando la pongamos encima del molde la terminamos de acoplar con la ayuda de los dedos. Todo este trabajo de amasar debe ser rápido, recordar que estamos trabajando con mantequilla y esta con el calor de nuestras manos se derrite. Si es necesario podemos meterla de vez en cuando en la nevera. Nosotras hemos dejado la base de la masa quebrada gruesa para que no se rompa al cortar las porciones, y por que está muy rica ; )
¡Tenemos que engrasar el molde de cocina para que no se nos quede pegada la masa en el!
Ya tan solo nos queda hornearla. Para esto tenemos que hacernos con papel vegetal y unos pesos de cocina, o garbanzos en su defecto. Sobre masa quebrada ponemos el papel vegetal y sobre el, los garbanzos (estos son para que la masa no suba). ¡Al horno! a 120º, durante 15 o 20 minutos o hasta que esté dorada. En mitad de la cocción podemos quitarle el papel vegetal y los garbanzos para que se dore un poquito por encima. Cuando esté bien cocida sacamos y dejamos enfriar.
Ya casi hemos acabado.
A la hora de servir tenemos que montarla, yo la monté media hora antes de servir. Tenemos que montar la nata (crema de leche) con el azúcar, cuando esté lista la mezclamos con el queso blanco y la cucharadita de esencia de vainilla. Para mezclar el queso con la nata (crema de leche), hacedlo con movimientos suaves y envolventes, no queremos que nuestra nata (crema de leche) recién montada se nos baje.
Por otro lado lavamos las brevas o los higos, y los cortamos como más nos guste, nosotras los hemos cortado en cuatro partes y luego cada parte por la mitad, todo ello de forma vertical.
¿Fácil no?
Notas:
Podemos sustituir las brevas o higos por cualquier otra fruta que tengamos en casa.
Los garbanzos que uséis como peso para la masa quebrada, guardadlos para otras ocasiones, se quedaran tostados y nos pueden durar unos cuantos horneados más.
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