Hoy vamos a preparar una receta muy sencilla que puede ser un gran aperitivo o tapa con la que podemos sorprender a nuestros invitados, tostas de Afuegal Pitu con mermelada de tomate y avellanas.
Esta receta es mi versión de una que me comentó Monsieur Accidents que vio por internet, no sé donde la vio, lo que sé es que cuando me comentó los ingredientes pensé, "tengo que probarla" y aquí estamos. ¿Os apetece que le hagamos y probemos?
Los ingredientes que vamos a necesitar para seis tostas son:
6 galletas marineras
1/3 de queso Afuegal Pitu
6 cucharadas de mermelada de tomate
6 cucharaditas de avellanas troceadas
1 ramita de tomillo
Como base para las tostas podemos sustituir las galletas marineras por panecillos tostados o una rebanada de pan recién hecho, teniendo en cuenta la textura y sabor que queramos aportar a la elaboración.
De las dos variedades que hay del queso Alfuegal Pitu vamos a elegir la roxu para esta elaboración, porque su sabor picante contrasta muy bien con el dulzor de la mermelada.
El Afuegal Pitu es un queso graso que se elabora con leche entera de vaca, que puede ser fresco o maduro y de pasta blanda de color blanco o anaranjado, como es el que vamos a utilizar. Tiene forma troncocónica debido a los moldes utilizados en forma de cono truncado.
El pimentón que se añade a la cuajada durante elaboración, además de aportarle color, intensifica su sabor y le da el toque picante que tiene la variedad de queso rojo o "roxu".
Preparación:
Comenzamos echando un puñado de avellanas en un mortero y las machacamos un poco. A mí me gusta hacerlo así porque los trozos son irregulares y le aportará más carácter a nuestra tapa. Reservamos.
Con ayuda de una lira cortamos el queso en láminas finas y comenzamos el montaje, de manera que cogemos una galleta y la cubrimos con las láminas de queso.
A continuación colocamos un poco de mermelada de tomate sobre el queso.
Por último, espolvoreamos un poco de avellanas machacadas por encima.
Presentación:
Lo vamos a presentar en un plato que decoramos con una ramita de tomillo y lo vamos acompañar de un cuenco con mermelada y otro con avellanas por si los comensales quieren añadirle un poco más.
En cuanto al maridaje, no hay nada mejor que una sidra asturiana y si es natural mucho mejor.
¿Qué te ha parecido esta tapa? Te recomiendo que la hagas y la pruebes, te va a sorprender. El sabor picante del queso contrasta muy bien con el dulzor de la mermelada de tomate y el fruto seco amortigua la mezcla de sabores fuertes. Sin duda, una combinación de sabores que no te dejará indiferente.
Bon appétit!