Algunos de vosotros ya la habéis probado y sabéis lo buena que está.
Ahora soy yo la que quiere compartirla con vosotros y empiezo por indicaros los ingredientes:
masa para pizza
100 g de hummus
100 g de queso feta
1/2 calabacín
6 tomates cherry
sal
pimienta
aceite de oliva virgen extra
crema de vinagre balsámico
hojas de menta
La masa de pizza la podemos hacer nosotros pero, si disponemos de una masa finísima para pizza ya preparada, que está bastante bien, ¿por qué no usarla?
Lo mismo pasa con el hummus, está muy rico el que hacemos en casa, pero siempre tengo en el frigorífico algún bote comprado para cualquier emergencia.
El aceite que he utilizado es Oro de Bailén, con su toque a tomate.
Y, para mí, es un lujo poder utilizar los tomates cherry de mi pequeño huerto urbano, al igual que las hojas de menta.
Preparación:
Lo primero que hacemos es precalentar el horno a 240ºC.
Extendemos el hummus sobre la base de pizza. A continuación, desmenuzamos el queso feta sobre el hummus.
Con un pelador de verduras, cortamos el calabacín en tiras finas y largas, que colocaremos sobre los ingredientes que ya tenemos sobre la base de la pizza.
Cortamos los tomates cherry por la mitad y los colocamos en la pizza.
Horneamos durante unos 10 minutos.
Transcurrido ese tiempo sacamos nuestra pizza a la que le añadimos las hojas de menta, rociamos con crema de vinagre balsámico y aceite de oliva virgen extra.
Como el hummus y el queso feta tienen mucho sabor, no es necesario añadirle sal, solo aderezamos con un poco de pimienta para darle un suave toque picante.
¿Qué os parece el resultado? Os puedo asegurar que el sabor es sorprendente.
Bon appétit!!!
Fuente: este post proviene de Pequeños Accidentes, donde puedes consultar el contenido original.
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