Por eso hoy os traigo 6 espectaculares platos de cuchara para que entréis en calor.
Comienzo sugiriendoos unas sencillas patatas con costilla de mi propio blog. Lo bueno que tiene este plato es que, además de ser muy sencillo de preparar y bastante económico, permite sustituir la costilla por cualquier otra carne que tengáis en casa. Yo he llegado a hacerlo con sobras del cabrito de la cena de nochebuena y no sabéis qué sabor. VER RECETA AQUÍ.
Me ha resultado muy curioso conocer el gazpachuelo, un plato típico de Málaga cuyo punto de partida es la mayonesa casera. Parece raro, pero si os pasáis por el blog de Isa, Cocina con Reina, descubriréis una auténtica delicia a la que podéis añadirle muchos ingredientes y que os hará entrar en calor seguro. VER RECETA AQUÍ:
El cocido es un guiso a base de legumbres, carnes variadas, embutidos y verduras. Hay muchas variedades de cocido, pero todas tienen algo en común, además de ser súper nutritivas y de entonarte el cuerpo a la segunda cucharada: que las ollas que preparamos son muuuuy grandes y siempre sobra algo. Para aprovechar estos restos de cocido, a mí me encanta preparar la llamada ropa vieja. En esta ocasión, os remito al blog de Amalia, Cuadernos de cocina, para que aprendáis a prepararlo. Su versión es ligeramente diferente a la mía, ya sabéis aquello de que cada maestrillo tiene su librillo.
VER RECETA AQUÍ:
Hace frío, llegas a casa tarde y cansado de trabajar, el frigorífico está medio vacío, ¿qué puedes preparar? Con pocos ingredientes, una sopa de ajo te ayudará a ver las cosas de otra manera. Y si te encuentras en tu maltrecha despensa un trocito de bacalao, la preparas de lujo, como hace Lucía, de De pucheros y otros.
VER RECETA AQUÍ.
Las judías casan bien también con pescado. Esto hará que el plato sea más ligero y menos calórico que si lo hacemos con carne (no por la carne, si no porque cuando se cocinan con ella, se suelen añadir, además, embutidos). Chus, del blog Para andar por casa, nos muestra como hacer unas deliciosas judías marineras con pulpo, gambas y chirlas. VER RECETA AQUÍ.
Si conseguís alguno de los pocos níscalos que ya deben de quedar por el monte, podéis aprovechar para cocinar unas patatas con níscalos, según la receta de Patricietas, recetas y lo que se me ocurra, ¡cómo tienen que estar de ricas, con lo que a mí me gustan los níscalos! VER RECETA AQUÍ.
¿Habéis entrado en calor? No olvidéis que los platos de cuchara son parte fundamental de la dieta mediterránea. Aprovechad para tomarlos ahora que el tiempo lo pide.
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