La alcachofa es una hortaliza de invierno que podemos consumir de múltiples maneras, guisadas, con arroz, pasta, etc., es la verdura que proporciona más fibra y ayuda a bajar los niveles de colesterol.
Las cocines como las cocines, siempre triunfas, como yo, cuando preparé éstas, fueron un éxito. Anímate a prepararlas y ya me contarás.
Ingredientes para 4 personas:
8 alcachofas
300 gr de queso fresco de oveja
2 lonchas de jamón serrano
una loncha de tocino
un huevo
un diente de ajo
una cebolla
un vasito de vino blanco
una ramita de perejil
3 tomates hermosos maduros
1/2 vasito de aceite de oliva
un limón
sal
pimienta negra molida
Preparación:
Quitar las primeras hojas de las alcachofas y cortar el resto a nivel del corazón, lavarlas bien con agua y limón y ponerlas a hervir en una cazuela con agua, sal y zumo de limón durante 20 minutos. Una vez cocidas escurrirlas y reservarlas.
Cortar el jamón y el tocino en dados, lavar y picar el perejil. Pelar y machacar el diente de ajo y pelar y cortar la cebolla en juliana.
En una sartén con un chorrito de aceite, saltear el tocino y la cebolla, después añadir el ajo machacado y los tomates pelados y cortados en cuadraditos y freír durante 10 minutos.
Salpimentar y añadir el vino y dejar hervir otros 10 minutos más a fuego suave.
Saltear el jamón en una sartén con unas gotas de aceite.
Batir el huevo, añadir el jamón, perejil picado, el queso chafado con un tenedor, sal y pimienta. Con esta mezcla, cubrimos las alcachofas.
Ahora ponemos la salsa que hemos preparado en una fuente apta para horno, encima las alcachofas y las metemos al horno precalentado a 180 grados durante 10 minutos.
Fuente: este post proviene de La cocina de Catina, donde puedes consultar el contenido original.
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