Estas bolitas de queso con arándanos y jamón son ideales para presentar en cualquier fiesta. Además, ahora que se acerca la navidad y todos vamos un poco liados con tanto preparativo, os tengo que decir que se pueden hacer las bolitas de queso y dejarlas en la nevera el día anterior. En el último momento sólo se tendrían que rebozar y justo antes de servir ponerlas en el palito.
Esta receta la encontré en el número 98 de la revista Thermomix. Me llamó la atención por los ingredientes, y porque era muy fácil de preparar. La he hecho dos veces. La primera la hice tal cual estaba en la revista. Tengo que decir que no nos acabó de gustar, pero como soy un poco tozuda, y creo que una receta así vale la pena, decidí hacerla a mi manera, con unos pocos cambios.
La segunda vez las bolitas quedaron buenísimas. Además, el hecho de que las bolitas estén sujetas a unos palitos de pan tipo grissini, le da un toque de originalidad estupendo. Eso sí, si no queréis ponerle los palitos de pan, podéis hacerlas sin palitos, o ponerle unos palitos de madera, para que queden al estilo "chupa chups". Eso ya depende de vosotros mismos.
Ingredientes:
40 g de kikos (Para quien no sepa qué son los kikos, son los granos de maíz tostados con sal)
70 g de jamón curado (cortado en dados no muy grandes)
40 g de arándanos rojos deshidratados
1/4 de cucharadita de café de pimienta
250 g de queso cremoso (yo puse Philadelphia)
24 palitos (colines, tipo grissini) Esto es opcionalPreparación:
Si vais a servirlo inmediatamente, lo primero que haremos será picar los kikos. Los usaremos para rebozar las bolitas de queso. Lo hacemos así porque tenemos el vaso limpio, y así no tenemos que volver a limpiarlo y secarlo.
Aseguraos de que el vaso la Thermomix esté bien limpio y seco antes de realizar este paso.
Si vais a dejar preparadas las bolitas de queso y acabar de rebozarlos al día siguiente, dejaremos este paso para ese día, cuando lo vayáis a presentar. De esta forma, los kikos no se pondrán blandos.
Para picar los kikos, los pondremos en el vaso de la Thermomix.
Los pulverizaremos durante 10 segundos a velocidad 10.
Reservamos los kikos en un recipiente tapado con papel film.
A continuación comenzaremos con las bolitas de queso. Sin limpiar el vaso, ponemos los dados de jamón curado.
Añadimos los arándanos.
Lo trituramos todo durante 15 segundos a velocidad 7. No deben de quedar trozos grandes. Si queda algún trozo grande, programar otros 5 segundos a velocidad 7. Tiene que quedar más o menos así:
A continuación, añadimos el queso.
Añadimos también el cuarto de cucharadita de café de pimienta.
Mezclamos durante 10 segundos, velocidad 3, giro a la izquierda.
Reservamos la mezcla en un recipiente.
A continuación, procederemos a hacer las bolitas. Podéis usar 2 cucharas o hacerlas con las manos. A mi me fue mejor con las manos. No me importa pringarme un poco y salen más redonditas. Haremos bolitas de unos 3 cm de diámetro.
Si los estáis haciendo de un día para otro, en este momento podemos guardar las bolitas de queso en la nevera tapadas con papel film y con cuidado de que no se chafen. Aguantan perfectamente 24 horas. Laváis y secáis bien la Thermomix y al día siguiente, justo antes de servir, picáis los kikos. Sacad las bolitas de la nevera unos minutos antes para que no estén tan frías.
Una vez picados los kikos y hechas las bolitas, justo antes de servir (esto es muy importante, ya que si no lo hacéis así, se os quedarán los kikos y los palitos humedecidos) procederemos a rebozar las bolitas con los kikos.
Hay una forma bastante fácil de rebozarlos. Esto os vale para estos aperitivos o para cualquier cosa redonda que queráis rebozar (por ejemplo, albóndigas). Además, podéis ahorrar bastante la cantidad de kikos, pan rallado, harina, o lo que queráis usar para rebozar. En este caso, usaremos los kikos picados.
Ponemos en una taza una cucharada de kikos picados.
Ponemos dentro de la taza la bolita de queso.
A continuación vamos moviendo la taza haciendo círculos y haciendo que la bolita ruede dentro. De esta forma, la bolita se va rebozando sola y usamos la cantidad justa que necesitamos.
Como véis, los kikos picados se han quedado un poco pegados a la taza. Con una cuchara, removemos los kikos de dentro de la taza y seguimos con la siguiente bolita. Si vemos que no hay suficientes kikos en la taza, añadimos otra cucharada más y seguimos rebozando. Así hasta acabar con todas las bolitas.
Podéis poner las bolitas en palitos de madera, o servir las bolitas tal cual. Sin pincharlas en nada. La receta original es con colines (palitos, grissinis)
Si vais a poner los colines: El ultimísimo paso que se ha de hacer antes de servir (también muy importante) es pincharlas en los colines justo antes de llevarlos a la mesa.
¿Qué pasa si los dejáis por ahí pinchados en los colines sin llevarlos a la mesa? Pues que los colines se humedecerán y como las bolas pesan, se romperán los colines y se os caerán las bolas (sí, ya sé que suena un poco mal, pero es así... jajaja. A mi me pasó la primera vez que las hice). Por eso, las siguientes veces que los haga los pondré en palitos de madera, o simplemente, los dejaré en un plato, sin pinchar.
Eso sí: Queda resultón eso de servirlas pinchadas con colines... jajaja.
¡Espero que os haya gustado la receta!. Si es así, no os perdáis mis actualizaciones. Podéis seguirme haciendo click en "Me gusta" de Facebook, añadiéndome en vuestros círculos en Google +, en Twitter, o en Instagram.