La receta la hice totalmente a mano, pero si tenéis algún robot amasador podéis utilizarlo. No tiene complicación salvo el propio amasado. Debemos respetar los tiempos de fermentación, que son dos, y dependerán de la temperatura ambiente de vuestra casa. Los ingredientes son "de andar por casa" así que no os será difícil conseguirlos. Solo añadir que los bollitos nos encantaron, algunos los comimos con chocolatina y otro solos. Salieron muy amarillitos por dentro, puesto que llevan huevos de gallinas felices. Como siempre digo, cuánta mayor calidad en los ingredientes mejor saldrá la receta.
INGREDIENTES
Para la masa:
400 gr de harina de fuerza (la mía de Gallo)
100 ml de leche
2 huevos
75 gr de mantequilla en punto pomada
25 gr de levadura prensada (de panadería)
75 gr de azúcar blanca
5 gr de sal
Para el acabado:
1 huevo batido
100 gr de azúcar blanca
3 cucharadas de agua
ELABORACIÓN:
1. En un cuenco grande ponemos la harina, el azúcar y la sal. Mezclamos.
2. En el centro, hacemos un hueco a modo de volcán, e incorporamos la mantequilla en dados, la leche templada y la levadura desmigada. Comenzamos a mezclar con una cuchara para deshacer la levadura y la mantequilla. Agregamos los huevos y seguimos trabajando la masa, que empezará a adquirir mayor consistencia. Es el momento de amasar con las manos durante un buen rato. La masa resultante será ligeramente pegajosa pero manejable.
3. Hacemos una bola con la masa y la ponemos en un cuenco espolvoreado con harina y cubierto con un paño. Dejamos que fermente en lugar cálido hasta que doble su volumen. La mía tardó casi tres horas en subir, pero depende mucho de la temperatura ambiente.
4. Una vez que la masa haya fermentado volvemos a amasarla para desgasificar. Hacemos un cilindro con ella y la dividimos en pequeñas porciones a las que daremos la forma de bollo, teniendo en cuenta que fermentará de nuevo y doblarán su volumen. Colocamos los bollitos sobre la placa del horno previamente forrada con papel vegetal (papel de horno) y esperamos hasta que la masa vuelva a subir. Es conveniente dejar una buena separación entre bollo y bollo para que no se toquen cuando aumente la masa.
5. Precalentamos el horno a 180º.
6. Mientras, prepararemos el acabado de los bollitos. Los pintamos con huevo batido y hacemos en el centro de cada uno un corte poco profundo. En una tacita mezclamos el azúcar y el agua. Añadimos un poco de este azúcar humedecido sobre los bollos, especialmente en la zona del corte.
7. Horneamos durante 20 minutos con ventilados, a 180º. Retiramos del horno y dejamos enfriar los bollos sobre una rejilla.
¡Buen provecho!
Nos vemos en la siguiente publicación, mientras podéis encontrarme en mi página de Facebook , en Google +, Pinterest e Instagram.