Ingredientes:
4 alcachofas
1 limón
Harina de arroz
Agua muy fría
Aceite de Girasol
Sal y pimienta
Pimentón de la Vera
Elaboración:
Cortamos los rabos de las alcachofas. Les quitamos las primeras hojas y cortamos hasta dejar únicamente los corazones.
Las cortamos con la mandolina o si no tenemos, con un cuchillo bien afilado, a rodajas muy finitas.
Las dejamos en un cuenco con agua y un chorrito de limón para que no se ennegrezcan. Reservamos.
Mientras en otro bol tiramos la harina y el agua bien fría. Nos tiene que quedar una pasta, ni muy espesa, ni muy clarita. Salpimentamos y echamos una cucharadita de pimentón de la vera. Su sabor ahumado, le dará un toque muy especial. Dejamos reposar la pasta unos 15 minutos.
Escurrimos bien las alcachofas. Salpimentamos e introducimos en el bol de la pasta anterior.
En un cazo, calentamos abundante aceite de girasol.
Una vez esté bien caliente, vamos friendo las alcachofas.
Las disponemos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.
Servimos bien calentitas