Hoy cocinamos cocido, una de las recetas más tradicionales y versátiles de nuestra gastronomía.
Como tal, cuenta con múltiples y variadas versiones, tanto en los ingredientes que se utilizan, como en la forma de cocinado y, hasta en la forma de comerlo. De hecho, en casa, lo comemos de dos formas distintas: hay quienes lo prefieren en dos platos (sopa, verdura y legumbre por un lado, y carnes por otro) y hay quienes lo prefieren en tres (primero sopa, por otra lado verdura y garbanzos, y, por último, las carnes).
La receta que verás a continuación es tal y como lo cocino en casa. A lo largo del tiempo he ido variando los ingredientes y las versiones y así es como nos gusta más y también como más lo aprovecho porque, otra de las ventajas de este plato es que, con lo que sobra, se pueden preparar, entre otras cosas, unas riquísimas croquetas de cocido, que se congelan perfectamente y que son una de nuestras favoritas.
Te explico, paso a paso, como preparamos esta receta de cocido en casa, empezamos, como no, con la lista de ingredientes:
Receta de cocido: ingredientes
300 gr de garbanzos
2 muslos de pollo con contramuslo
400 gr de morcillo de ternera
150 gr de tocino
300 gr de jamón en una pieza (puedes utilizar menos cantidad y hueso o punta)
1 hueso de espinazo
medio repollo
1 pie de cerdo (de los salados y secos)
fideos tipo cabellín
3 huevos
perejil
1 diente de ajo
pan rallado
sal
Como hacer cocido con rellenos: paso a paso de la elaboración
1Empezaremos poniendo la noche anterior los garbanzos en remojo. Los colocaremos en un bol alto y los cubriremos sobradamente con agua caliente. Hay que tener en cuanta que los garbanzos, al menos, doblarán su volumen, así que no debemos quedarnos cortos con la cantidad de agua que los cubre. Los dejaremos en remojo a temperatura ambiente.2Al día siguiente, desechamos el agua del remojo, enjuagamos los garbanzos y los ponemos en la olla. Añadimos también el pollo, el jamón, el morcillo, el tocino, el pie, el espinazo o el hueso (toda la carne salvo el chorizo) y el repollo ya limpio. Cubrimos con agua, nunca sobrepasando 2/3 de la capacidad de la olla. Añadimos una pizca de sal (ojo, que lleva ya ingredientes con sal) y cerramos.
3Ponemos la olla a fuego medio- fuerte. Se formará una espumilla, que debemos retirar para que nos quede un caldo limpio. Bajamos un poco el fuego y cerramos la olla. Cuando empiece a salir el vapor, contamos 25 minutos de cocción. Podemos aprovechar este tiempo para cocer el chorizo, lo pondremos en una cazuela cubierto con agua y lo dejaremos hervir durante 20 minutos. Pasado este tiempo, comprobaremos el punto de cocción y retiraremos del fuego o dejaremos cocer un poco más si es necesario.
4Pasados los 25 minutos de cocción del cocido, retiramos la olla del fuego y la dejamos reposar, sin abrirla, hasta que haya perdido todo el vapor.
5Cuando la olla haya perdido toda la presión la abrimos y, con la ayuda de una espumadera, sacamos las carnes y la verdura. El caldo, lo colaremos y lo pasaremos a la cazuela donde luego coceremos los fideos y los rellenos.
6 Pasamos ahora a hacer los rellenos. Machacamos en el mortero un diente de ajo ligeramente picado, unas hojitas de perejil fresco y sal al gusto. Batimos los huevos como si fuéramos a hacer una tortilla, le añadimos el contenido del mortero y dos o tres cucharadas soperas del caldo del cocido (cuidado de no añadirlo muy caliente o se cuajarían los huevos). Mezclamos todo y añadimos pan rallado, aprox. cucharada y media por huevo, aunque lo ideal es ir añadiendo a ojo y mezclando hasta que tengamos una mezcla ligeramente espesa pero jugosa.
7Ponemos aceite a calentar en una sartén y, cuando coja temperatura freimos los rellenos. El tamaño es al gusto, yo suelo poner una cucharada sopera de mezcla para cada relleno. Los freímos unos minutos por cada lado, dorándolos ligeramente.
8Por último, ponemos al fuego el caldo del cocido y, cuando rompa a hervir, incorporamos en la cazuela los fideos y los rellenos y cocemos, todo junto, durante unos 3 minutos, el tiempo justo para que el fideo esté cocinado.
Consejos y otras opciones de preparación
Puedes optar también por cocer el chorizo en la olla, junto con el resto de ingredientes. En este caso el caldo quedará con más color y un sabor más intenso.
Si tienes la oportunidad, haz la preparación de la olla el día antes de comer el cocido. Cuela el caldo y déjalo reposar en la nevera, se formará una capa algo consistente en la superficie. Retírala con la cuchara, así conseguirás retirar el exceso de grasa y el caldo quedará más ligero y menos fuerte.
La versión más tradicional de este guiso se cocina sin olla rápida, realizando la cocción directamente en cazuela, como hacían las abuelas. Lógicamente, esta opción requiere de bastante más paciencia, ten en cuenta que los garbanzos tardan un mínimo de 2 horas en cocinarse. Y, antes de irme, quiero recomendarte otra receta de un guiso tradicional, estas patatas con carne que no pueden faltar en ningún recetario!