Se trata de una receta muy sencilla, saciante y deliciosa. Si tenéis mandolina, os facilitará la tarea de cortar el repollo en juliana bien finita. Si no la tenéis, que no cunda el pánico. Yo lo hago con un cuchillo bien afilado y un poquito de paciencia {que es la madre de la ciencia}. Bien finito, para que ninguno de los ingredientes destaque sobre los otros. La zanahoria y la manzana, pues también a cuchillo o, si queréis, con un rallador grueso.
Una gran opción, sobre todo para hacer esta ensalada más vistosa, es mezclar diversos tipos de col o repollo. Por ejemplo, podemos mezclar algo de lombarda, que le dará un toque de color y sabor espectacular. En mi casa, cuanto menos cosas de colores haya en el plato, mejor.
Mis hijos, que son unos petardos, lo que obviamente no han heredado de su madre {ooooooops} tienen una cruzada en torno al modus cocinandi de su progenitora {o sea, yo}. ¿Cuándo vas a hacer comida normal?, me dicen... ¿Normal? ¿Me definís qué queréis con exactitud de cirujano? Pues eso, sin guisantes, ni zanahoria, ni espárragos, ni empanados raros, ni mostaza de Dijon, ni nada de nada...
Pues ya lo siento, porque hoy, junto a unas hamburguesas riquísimas de calabacín y zanahoria, hay coleslaw para comer.
Por cierto, si sois veganos y queréis adaptar esta receta, simplemente tendréis que sustituir la mayonesa normal por una opción vegana, que se puede encontrar fácilmente en tiendas especializadas.
Coleslaw {ensalada de col}
Ingredientes para 4 personas
1/2 repollo pequeño (sobre 500 g).
2 zanahorias.
1 manzana grandecita.
Para el aliño
3 cucharadas de mayonesa.
1 cucharada de vinagre blanco.
1 cucharadita de mostaza de Dijon.
sal y pimienta.
Tradicionalmente se le añade también azúcar al gusto, pero yo no se lo pongo.
Preparación:
1. Mezclamos los ingredientes del aliño en un bol pequeño y reservamos.
2. Con paciencia {o con ayuda de una mandolina}, cortamos el repollo en juliana muy fina. También rallamos primero la zanahoria y por último la manzana, para evitar al máximo la oxidación.
3. Ponemos el aliño en la ensalada y mezclamos bien todo junto.
4. Reservamos en la nevera, si es posible al menos una hora, y servimos bien fresquita.