Con San Valentín a la vuelta de la esquina he optado por una presentación romántica en dos versiones: una mega fácil en vasitos y otra mas sofisticada con un glaseado brillante PINK.
Cómo hacer Mousse de fresa >>> Receta fácil y rápida.
Cómo hacer Mousse de fresa. Receta fácil
Ingredientes
Para la Mousse
250 gr fresas
125 gr azúcar
250 gr nata (crema de leche) semi montada
4 hojas de gelatina
Para la gelatina
100 gr fresas
25 gr azúcar
2 cucharadas de agua
2 hojas de gelatina
Para el glaseado brillante
50 ml agua
100 gr azúcar
100 gr glucosa
65 ml leche
100 gr chocolate blanco
5 hojas de gelatina
colorante liposoluble rosa
Elaboración
Gelatina de fresa
Hidrata la gelatina en agua fría.
En un cazo pon las fresas, el agua y el azúcar a hervir a fuego medio durante 5-7 minutos.
Inmediatamente pasamos por un turmix para triturar y le añadimos la gelatina escurrida, removiendo hasta que se disuelva por completo.
Vertemos el puré de fresas en un molde (en este caso he utilizado un molde corazón) para que gelifique. Introducimos en el frigorífico y dejamos que cuaje por completo (4-5 hrs). Mousse de fresa
Hidrata la gelatina en agua fría.
Tritura las fresas con un turmix y pasa por un chino o tamiz para evitar impurezas. Agrega el azúcar y remueve. Seguidamente agrega la gelatina (previamente escurrida y disuelta en el microondas durante medio minuto) y remueve hasta que se integre por completo. Por último añade la nata (crema de leche) semi montada y remueve con ayuda de una espátula y movimientos envolventes hasta que la mezcla no tenga vetas de color.
Si optas por ponerlo en copas, desmolda los corazones y coloca uno sobre el cristal, con solo apoyar con los dedos la gelatina se pega. Vierte la mousse hasta el borde del vaso e introduce en el frigorífico durante al menos tres horas.
Si optas por ponerlo en un molde de semiesfera para luego glasearlo, vierte la mousse hasta la mitad del molde, introduce un corazón de gelatina y vierte más mousse hasta el borde del molde alisando con una espátula, como puedes ver aquí. Pon el molde en una bandeja e introduce en el congelador durante al menos 4 horas antes de glasear.
5 trucos infalibles para hacer glaseado espejo en tus tartas…
Glaseado brillante
Para esta mousse de fresas he elegido un precioso color rosa, pero puedes hacer el mismo glaseado del color que tu prefieras. A priori estos glaseados dan un poco de respeto, pero lo cierto es que son lo más sencillo del mundo si tienes en cuenta estos trucos.
Trucos para un glaseado brillante perfecto
Sigue al pie de la letra las instrucciones de la receta, con estos glaseados hay que ser muy meticuloso tanto en las medidas como en el procedimiento.
Pesa cada ingrediente con esmero y ten preparado cada uno de ellos para empezar a realizar la receta.
Es absolutamente necesario utilizar un termómetro de cocina digital para controlar la temperatura del glaseado, si nos pasamos o no llegamos a la temperatura correcta, el glaseado perderá su efecto espejo extra brillante.
La base del glaseado es el chocolate blanco, por tanto el colorante que uses para teñir debe ser liposoluble, es decir, apto para chocolate; pues en caso contrario se estropeará.
Justo en el momento que el glaseado está preparado, saca del congelador la pieza a glasear, desmolda y coloca en una rejilla. Es imprescindible que la pieza que vayamos a glasear esté congelada para que el glaseado cuaje de forma instantánea al tomar contacto. Pues vamos manos a la obra, es mucho más fácil de lo que parece. Desde hoy puedes preparar un glaseado espejo brillante del color que elijas para decorar tus pasteles.
Hidrata la gelatina en agua fría.
En un cazo pon el agua, el azúcar y la glucosa a fuego medio hasta que alcance los 103 º C.
Retira del fuego, añade la leche fría y el chocolate rallado o picado finamente. Mezcla hasta que el chocolate se disuelva por completo.
Ahora añade la gelatina hidratada y bien escurrida, y mezcla nuevamente hasta que se disuelva.
Por último añade el colorante hasta obtener el color deseado.
Ahora deja el glaseado que repose y con el termómetro deja que le baje la temperatura antes de usarlo. Para glasear no debe bajar de 30 ºC (pues cuajará) ni estar por encima de los 35 ºC (pues resbalará sobre la mousse sin cubrirlo). Por tanto, lo ideal es que a unos 32 ºC, saques la mousse del congelador, la colocas sobre una rejilla y acto seguido viertes el glaseado.
Voilà! Nuestro glaseado espejo está listo. Puedes decorar los bordes con coco rallado, non pareils, granulado de frutos secos…
Con esta mousse de fresa mega fácil y deliciosa vas a triunfar en casa. Si un día tienes invitados a los que quieras sorprender tan solo tienes que prepararles un glaseado brillante para dejarles boquiabiertos.
Hasta el próximo post.
Besos
Laura
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