Señoras y señores, en el culo tengo flores y el nabo caracoles. Menuda recetaza que nos sacamos el otro día de la manga. Hice una crema de calabacín para cenar. Algo simple. Pero se me ocurrió ponerle un trocito de queso roquefort y batirlo.
También usé unos kikos que tenía a modo de picatostes. Le dan un punto saladito y un crujiente muy rico. La locura. Atentos:
DIFICULTAD:
No hace falta apellidarse Adrià
INGREDIENTES:
Un par de calabacines
Una patata
Media cebolla
Dos pastillas de caldo concentrado
Un trocito de queso roquefort. Ponle la cantidad que quieras. Ponle poco y será una crema normal, o ponle mucho y sabrá a pies. ¡¡Qué rico es el roquefort!!
Una cayena (opcional)
Pimienta negra, sal y aceite de oliva.
Kikos a modo de picatostes (opcionales)PREPARACIÓN:
Pon en una olla un chorrazo de aceite de oliva y ponle la media cebolla picada. No hace falta que la piques mucho, luego la pasaremos por la batidora, así que no te esmeres demasiado. Mete ahora la cayena si se la vas a poner.
Pela un poco los calabacines. No le quites toda la piel, pero sí la mayor parte. Los cortas en rodajas y a la cazuela con ellos. Ni que decir tiene, que tienes que lavarlos primero. No lo dije antes, porque vosotros ya sois mayores, pero vamos, que lo digo si hace falta.
Mientras se sofríen un poco, pela la patata y la cortas en cachelos. Para los que no sepan lo que son los cachelos, lo explico. Es una forma de cortar en la que metes el cuchillo hasta la mitad, y lo giras para que se acaben de partir rompiendo la patata. Es para jugar con el almidón, pero eso tampoco importa demasiado.
Deja todo en la olla un minutito y lo cubres con agua (un dedo por encima de la verdura). Ponle sal, pimienta negra y las pastillas de caldo.
Deja que hierva hasta que la verdura se haga y esté blandita. No tarda mucho, 15 minutos o así. Pero ve viendo.
Quita un poco de agua con ayuda de un cazo y guárdala en un bol por si te hiciera falta para luego. Es que el calabacín suelta agua al hacerse. Pásalo por la batidora bien y añade un poco más del agua que has quitado si la quieres más líquida.
Ponle el trozo de roquefort y le vuelves a dar zapatilla con la batidora.
Pruébala de sal y pimienta, rectifica si hace falta y listo.
Como veis no le hemos puesto nada de nata (crema de leche) o de leche, no hace falta. Puedes hacer bastante y guardar el resto en táperes para congelar. Aún así, te aguantará unos cuantos días en la nevera.
Llevamos más de 80 recetas y ya vais viendo que cocinar es muy simple, que todo es ponerse y hacer cosas nuevas. Así que, a cocinar, filibusteros, que el mundo se va a acabar.