Una de mis incondicionales veraniegas. Fresquita, bien fácil y rápida de hacer. La crema de calabacín es un clásico que entra de maravilla, es muy suave y ligera por lo que gusta a todo el mundo. Se puede comer también en caliente pero a mí en verano, me pierde fría.Una receta sana, ligera y muy baja en calorías.
Crema fría de calabacín
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Tiempo:
Cocción
Total
Autor: Inés
Raciones: 4
Ingredientes
1 cebolleta grande
1 puerro grande
2 calabacines blancos (o pelados)
1200ml de agua
250 ml de leche de avena (u otro leche vegetal)
2 cucharadas de AOVE
Una poco de sal
Pimienta negra molida
Elaboración
Pica la cebolleta y el puerro. Rehógalos en una cazuela con un poco de aceite de oliva.
Lava los calabacines, si son verdes pélalos, pártelos en trozos e incorpóralos a la cazuela.
Añade el agua, la leche de avena, un poco de sal y u poco de pimienta negra molida.Cuando empiece a hervir, baja a fuego medio-alto, tapa parcialmente y deja que se cocine durante 15 minutos.
Tritura bien y déjalo enfriar en la nevera hasta que la vayas a comer.
Sirve la crema de calabacín bien fresquita con unos espárragos trigueros salteados por encima o con unas setas troceadas y pasadas por la sartén.
3.5.3208