Cuando empecé a estudiar la comida brasileña para participar en el reto de Cocinas del Mundo mi primera opción fue hacer otras recetas. Pensé primero en hacer alguna receta facilita y resultona. Me gustaron mucho dos, que me parecieron sencillas y comestibles para los paladares de mis hijas. Sin embargo, tenía una inquietud por esta decisión y seguí dándole vueltas a la cabeza, finalmente decidí elaborar la típica comida brasileña, la comida que me vino a la cabeza cuando supe que el reto era Brasil. Naturalmente, la feijoada. Sin duda el plato nacional de Brasil. Porque cuando piensas en cosas típicas de Brasil piensas en la samba, el carnaval de Río, la caipiriña y la feijoada. ¿A qué sí? Consiste en un guiso de alubias negras o frijoles y verduras, acompañados de un generoso compango de carnes de cerdo y embutidos. A mí me recuerda, en su forma de elaboración, y en los ingredientes utilizados, a un plato tradicional de nuestra cocina española como la fabada asturiana, al menos así me lo ha parecido.
Estos días he visto muchas recetas de feijoada y he seguido una mezcla de ellas. No he seguido una en concreto. La mayor parte de las recetas señalaban un ingrediente que me ha sido imposible encontrar: la carne seca de cerdo. Este ingrediente no lo he encontrado por ningún lado y os aseguro que lo he buscado.
Ingredientes para 6 personas:
500 g de frijoles negros
350 g de costilla de cerdo fresca
100 g de panceta ahumada
2 chorizos ahumados
1 morcilla ahumada
5 salchichas pequeñas
200 g de arroz
6 dientes de ajo (4 para los frijoles y 2 para el arroz)
1 cebolla
2 naranjas
Medio pimiento rojo
1 pimiento italiano
4 hojas de laurel : 2 para el arroz y 2 para los frijoles
Aceite de oliva
2 cucharada de sal y un poco más para salar la carne fresca
Elaboración:
Poner las judías en un bol con bastante agua (1 parte de frijoles y 3 de agua) y dejar en remojo de un día para el siguiente.
Al día siguiente escurrirlas.
Poner una olla con agua y una cucharada de sal y ponerla al fuego. Cuando empiece a hervir se ponen los frijoles y se dejan cocinar durante 30 minutos.
Salar las costillas y añadirlas a la olla, junto con los embutidos y la panceta. Añadir también el laurel. Dejar cocer todo junto durante 30 minutos.
Para el tempero (sofrito): cortar las cebollas tiernas, el pimiento rojo y el pimiento verde y los ajos pelados bien pequeños. Poner aceite en una sartén y saltear primero los ajos
y luego añadir las cebollas, y sofreirlas durante unos minutos.
Por último, añadir los pimientos y sofreír también.
A continuación, añadir a la olla en la que estamos cociendo las judías. Dejar cocinar durante 50 minutos.
Pasados los 50 minutos, retirar las carnes de la olla y reservar. Si los frijoles están duros, seguir cociendo un poco y si ya están blanditos, apagar el fuego.
Introducir el arroz en una olla con agua abundante, dos hojas de laurel, dos dientes de ajo sin pelar y una cucharada escasa de sal.
Retirar del fuego a los 18-20 minutos.
Reservar.
Pelar dos naranjas y cortarlas en rodajas.
Emplatar por separado las carnes, el arroz, las naranjas y los frijoles. Así cada uno se sirve los que más le gusta.
Mi opinión: aunque parece un plato muy elaborado, no lo es tanto, pero sí cuesta un poco de tiempo porque tiene que hacer chup-chup durante bastante rato. En algunas recetas que he leído también se podía acompañar con algún plato de acelgas hervidas, o col frita Yo he pensado que con lo que llevaba, ya iba bien ¡Ya! Y así ha sido. Es un plato de cuchara contundente. Plato único uniquísimo, pero se disfruta comiendo esos sabores tan potentes. Nos ha gustado mucho. Tendría que haber completado el viaje con una caipirinha. Hubiese sido lo propio.