Halloween se acerca, la noche anterior a nuestra festividad de Todos los Santos.
Estos ricos pastelitos nos vendrán bien para el truco o trato,
así evitaremos las travesuras de los pequeñajos.
Ingredientes
1 lámina de hojaldre
Confitura de calabaza (Mercadona)
Queso Philadelphia
1 huevo
Un poco de aceite
Preparación
Extiende la lámina de hojaldre y divídela en cuadrados. Saldrán unos 16.
Coloca en cada uno una cucharadita de queso y otra encima de confitura de calabaza.
Cierra cada pastelito uniendo las esquinas opuestas. Procura que se queden bien cerrados para que al pujar en el horno no se salga el relleno.
Pon papel para hornear en la bandeja del horno. Con un pincel de cocina extiende una pizca de aceite y coloca los pastelitos a cierta distancia.
Bate el huevo y con el pincel pinta cada pastelito por encima, deben quedar bien cubiertos.
Pon la bandeja en el piso del centro del horno y a 200 grados durante unos 15 minutos. Cuando los veas dorados estarán listos. No los pierdas de vista...
Ten cuidado al sacarlos para no quemarte. Espera a que estén fríos y disfrútalos.
No los tapes, quedarán más crujientes.