La receta es de uno de mis libros de repostería favorito,"Recetas de la pastelería Hummingbird",es un libro maravilloso, del que he preparardo un montón de recetas, que han sido todo un éxito.
Estas galletas llevan varias especies, entre ellas, la pimienta de Jamaica, que cuesta un poco encontrarla, yo la he comprado en el Carrefour. La melaza oscura es otro ingrediente estrella, a mí me lo trajo Ismael cuando estuvo en Miami, aquí lo podemos encontrar en tiendas de repostería. Este es el mio:
Ingredientes
Para 24 unidades:
400 g de harina.
¾ cucharadita de bicarbonato sódico.
2 cucharaditas de jengibre molido.
2 cucharaditas de canela molida.
1/2 cucharadita de pimienta de Jamaica molida.
¼ cucharadita de nuez moscada molida.
1/2 cucharadita de sal.
180 g de mantequilla a temperatura ambiente.
125 g de azúcar moreno.
1 huevo M.
125 g de jarabe de melaza negro.
Preparación
Tamizar en un cuenco la harina, el bicarbonato, el jengibre, la canela, pimienta, nuez moscada y la sal. Reservar.
Batir en un bol la mantequilla y el azúcar con una batidora de varillas a baja velocidad hasta que esté suave y esponjosa. Subir la batidora velocidad media e incorporar batiendo el huevo y la melaza, rebañando las paredes del bol con una espátula de goma.
Bajar a velocidad lenta y poco a poco agregar la mezcla de harina que teníamos reservada, un par de cucharadas cada vez, deteniéndose a menudo para rebañar las paredes del bol.. Cuando tengamos una masa homogénea, la dividimos en tres porciones, la envolvemos el film transparente y la dejamos reposar toda la noche en la nevera.
Precalentar el horno a 170ºC.
Retiramos la masa de la nevera y la dejamos atemperar 10 minutos.
Estirar la masa sobre papel de horno con ayuda de un rodillo, dándole como unos 4 mm de grosor.
Cortar los hombrecillos con el cortapastas, meter en la nevera las galletas ya cortadas durante unos
20 minutos. Colocar en la bandeja del horno sobre papel vegetal y hornear durante 15-20 minutos o hasta que veamos que estén hechas. Es importante hornearlas el tiempo justo, porque si nos pasamos en el horneado quedarán duras y si nos quedamos cortos quedarán crudas.
Dejar enfriar ligeramente las galletas antes de ponerlas sobre una rejilla metálica para que se enfríen por completo.
Decorar a vuestro gusto, con fondant o glasa, yo las decoré con mi pequeña y nos resultó más fácil con fondant.