El caso es que se me ha ocurrido buscar en google “cómo poner título a los posts de un blog“, y cuál ha sido mi sorpresa cuando he visto que hay un montón de trucos y tips que hablan sobre ésto. Me flipa internet! jajajaja busques lo que busques, siempre hay una respuesta a tu pregunta (por muy absurda que sea). Siempre hay alguien que ha decicado parte de su tiempo a escribir o elaborar algo para subirlo a la red.
Tampoco es que puedas innovar mucho en los títulos tratándose de un blog de cocina, ya que se suele poner el nombre de la receta. Vamos, lo que se ve en el plato…
En el caso de esta receta y, basándome en la definición de lasaña, no es que corresponda mucho el título con lo que se ve en el plato, ya que por lasaña se entiende un plato elaborado con láminas de pasta italiana. Y pasta, pastaa… no es que tenga mucha. Por no tener, no tiene ni la típica bechamel que acompaña siempre una buena lasaña. Lo que tienen en común es el montaje: capa sobre capa. Bueno…y que tanto la lasaña italiana como esta receta de salmón están de rechupete.
Sigue leyendo y te cuento como se prepara…
INGREDIENTES (para 2 personas)
200gr. de salmón fresco (sin piel ni espinas)
1 calabacín
queso rallado Para la bechamel:
1/2 cebolla
1 calabacín
un pedacito de queso roquefort (unos 15-20 gr) ELABORACIÓN
1.Cortar la cebolla en juliana y ponerla a sofreir.
2. Pelar y cortar a groso modo uno de los calabacines y añadir a la cebolla. Salpimentar
3. Darle un par de vueltas y cubrir con agua (sólo cubrir). Dejar cocer unos 20-25 minutos.
4. Mientras tanto, cortar el salmón a daditos y salar.
5. Pasarlos por la sartén simplemente para marcarlo. Retirar y reservar.
6. Lavar bien el otro calabacín y cortarlo a láminas muy finas con piel y todo. Si tienes mandolina, lo cortarás mejor. Salar y reservar.
7. Pasados los 25 minutos de cocción, escurrir bien el calabacín y la cebolla (teniendo en cuenta que el calabacín es una verdura que tiene mucha agua,quitar el máximo de agua posible) y triturar junto con el queso roquefort. Esto es lo que hará el papel de bechamel, así que insisto que hay que escurrir bien el agua para que no quede caldoso.
8. Montaje: en un recipiente para horno, cubrir la base con un poquito de bechamel de calabacín (muy poquito). A continuación, colocar 2 capas de rodajitas de calabacín para que haga de base de la receta. Ahora, añadir una capa de salmón desmenuzado a groso modo. Otra capa de calabacín y luego otra de salmón. Terminar con una capa de calabacín.
9. Cubrir con el queso rallado y hornear a 180º hasta que el queso quede gratinado.
Es posible que observes que suelta bastante agua mientras se hornea, no pasa nada. Saca el recipiente, tira el agua y vuelve a meterlo en el horno.
Espero que la disfrutes igual que lo hice yo.