Hasta los atardeceres malagueños son especiales, me hacen pensar que cada uno de ellos, de cualquier tarde de éste verano que casi está llegando a su fin han sido irrepetibles; cada uno me ha dejado su recuerdo, su historia, su momento….un detalle de ése día en la que he llegado a creer que todo aún podía suceder….
Puestas de Sol pintados con paleta de verano que se resiste a dejar ésta Málaga de mis amores, unos atardeceres que auguran unas vísperas de otoño, crepusculares, dominados por los tonos rojizos de sus ocasos, con una intensidad cromática sencillamente espectaculares.
Mi querida amiga, Reme Reina (Al Sur del Sur) gran bloguera malagueña, todo un referente de la gastronomía de éste Reino de Meridión llamado Málaga, a quien admiro y sigo su trayectoria gastronómica desde hace años, me ha prestado una foto que me ayuda a ilustrar ése gran espectáculo de los cielos malagueños, de su mano les dejo ver ése atardecer maravilloso…
Atardecer que admiro desde mi pequeño porche, que da hacia el oeste, donde cae el sol por el horizonte, un Sol rojizo e inmenso que tiñe las nubes y que baña de ocre toda la escena….para una vez más, dejarnos una estampa que nos deja extasiados.
Mientras, escucho de fondo aquella música, la de ésa canción que me conmueve y me hace recordar momentos únicos; suena al compás del agua de mi pequeña fuente que tintinea sobre los brillantes chinorros. Oscurece y se hace la noche...
Cierro los ojos y aspiro el perfume de mis jazmines y de la dama de noche que florece al atardecer de éstos días calurosos de Septiembre, impregnando la noche con su exquisita fragancia. Olores que se mezclan con el aroma del pan recién horneado que me llega desde Mi Cocina…..
Como siempre, mi marido prepara la mesa, como cada noche….enciende las velas, sus luces le dan un toque romántico y el movimiento hipnótico de ésas pequeñas lucecitas, del fuego de las velas dan ése calor de hogar a mi pequeño porche e ilumina de una manera especial ésos jazmines malagueños y a las diminutas flores de la dama de noche.
Hay muchos momentos mágicos en cada día de mi vida, en ellos hay muchas puestas de sol en mi diminuto jardín, sentados en nuestro balancín, esperando a nuestros invitados quizás, organizando una reunión alrededor de nuestra mesa para compartir el placer de su compañía y de las recetas que preparo para quienes llegan a visitarnos.
O sencillamente, cenar cada noche, los dos solos tras un día cotidiano ¡¡ momentos mágicos, deliciosos, únicos….!!
Hoy quiero compartir una receta muy simple, sencilla pero a la vez sorprendente, que suelo preparar cuando hay invitados en casa, para untar en los panecillos recién horneados…..mantequilla de wasabi con cilantro fresco. ¿Se animan a probarlo?
Quizás haya alguna persona que no sepa o incluso que conociéndolo, no haya probado el wasabi; por lo que si me lo permiten, les diré que el wasabi se emplea como condimento en Japón, se extrae de la raíz de la planta del mismo nombre, un rábano picante.
Antes de que los sistemas de refrigeración se perfeccionaran en Japón, el wasabi era utilizado para envolver los pescados crudos ya que posee propiedades antibacterianas y antisépticas. Actualmente se lo utiliza para realzar el sabor del sushi aunque sólo en pequeñas porciones debido a su característico sabor extremadamente fuerte y picante.
Yo suelo comprarlo en un supermercado oriental de Torremolinos, en forma de pasta….tiene un color verde intenso.
El cilantro fresco se puede encontrar en cualquier supermercado....
¿Cómo preparo ésta receta?
Ingrediente: en ésta ocasión no indico cantidades, va al gusto….dependiendo de la cantidad de mantequilla que necesiten, del picor o más o menos sabor al wasabi….y por supuesto la cantidad de cilantro que quieran echar en ella.
Los ingredientes son tres: mantequilla, pasta de wasabi y cilantro fresco.
Los pasos a seguir:
Dejar la mantequilla que ablande a temperatura ambiente, echar el wasabi y mezclar con un tenedor de forma que quede homogénea.
Picar el cilantro en trozos pequeños y agregarlos a la mezcla, removiendo hasta que estén completamente integrados.
¡¡ Disfrútenlo…les sorprenderá y sorprenderá, como los atardeceres malagueños !!