Mermelada de frambuesas y vainilla, la receta:
¿Qué es una mermelada? Es ese botecito de conserva que, cuando haces “clap” y lo destapas, te transporta con su olor y su sabor a un recuerdo dulce de otra temporada del año. Sí, ésa es una de las definiciones que podría darle a la mermelada, porque cada vez que en pleno invierno puedo abrir un bote y deleitarme con el sabor de la fruta veraniega, me parece un lujo.
En este caso, he querido encerrar en unos botecitos unas frambuesas aromatizadas con vainilla, para mí, una de las mejores mermeladas que haya podido hacer. Bueno, creo que no soy la única que lo piensa, ya que hace casi un año preparé una tarta de queso con esta mermelada que hay personas que todavía recuerdan y que están esperando al cumpleaños de mi hijo la semana que viene para que la vuelva a hacer…
En fin, no me voy a poner a hacer la lista de las propiedades nutricionales de las frambuesas, entre otras cosas, porque la fruta cocida tan a largo tiempo pierde prácticamente todas sus propiedades buenas… pero ¡shhh! ¡No se lo digamos a nadie! Nosotros comemos la mermelada porque nos gusta empezar el día con una buena sonrisa y… ¡éste me parece un excelente sistema! Lo demás… es secundario en este caso ;)
Mermelada de frambuesas y vainilla, ingredientes:
500 g de frambuesas
El zumo de medio limón
200 g de azúcar
1 vaina de vainilla
Mermelada de frambuesas y vainilla, preparación con Thermomix:
1. Lavar muy bien las frambuesas y dejarlas secar encima de un trapo limpio o de papel absorbente.
2. Poner en el vaso de la Thermomix las frambuesas, rociarlas con el zumo de limón y añadir el azúcar.
3. Abrir por la mitad larga la vaina, extraer las semillas y unirlas al resto de los ingredientes.
4. Cerrar el vaso y posicionar encima el cestillo (es solo para evitar las salpicaduras de la mermelada) y programar 35 minutos, temperatura 100 grados, velocidad 1.
5. Si os resulta demasiado líquida, programar otros 5/7 minutos con el Varoma.
6. Cuando esté al punto, pasar la mermelada aún caliente a los botes esterilizados previamente. Tapar los botes y darles la vuelta para crear el vacío (tienen que estar al revés hasta que se enfríe completamente la mermelada).
Mermelada de frambuesas y vainilla, consejos:
- Para estar seguros de que está al punto justo, es mejor hacer la prueba con una cuchara y un platito: echar unas gotitas de mermelada en un plato. Si lo inclináis y la mermelada cae rápidamente, quiere decir que todavía necesita unos minutos de cocción. Si, por el contrario, se resbala lentamente, entonces está lista.
- Lo normal es echar el azúcar en proporción 1/2 de la fruta. Yo, en cambio, he preferido usar solo 200 g para 500 g de azúcar para hacerla más "light", pero os aseguro que el sabor es muy dulce (aunque podéis aumentar la cantidad de azúcar según vuestros gustos).
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