Se trata de un postre riquísimo y muy fácil de preparar. Una mousse suave y esponjosita, como deben ser las mousses. Ahora que ya empieza a venir el buen tiempo, apetecen más los postres fresquitos, así que estoy segura de que a más de uno os vendrá bien.
Queda con una textura y un sabor súper suave. La verdad es que estuve un rato pensando si hacerla con queso tipo philadeplhia o queso fresco, y estoy contenta de haber hecho la mousse de fresas y queso fresco, al final, porque ha quedado muy rica. El sabor de las fresas es suave, pero sabe a fresas (obviamente). Por eso es tan importante escoger materia prima de buena calidad, y más importante aún en las recetas donde prácticamente sólo utilizamos dos ingredientes, porque cuanto más ricas estén las fresas y el queso, más rica estará la mousse.
La combinación de sabores está genial, quizás otro día pruebo de hacerla con mezcla de frutos rojos en lugar de fresas. Frambuesas, moras, arándanos, grosellas… seguro que queda riquísima también.
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A nivel nutricional está muy bien porque el queso fresco que he usado es bajo en grasas y rico en proteínas, y sumado a las fresas nos da un postre la mar de saludable y rico. Las fresas contienen:
Vitamina C
Hierro y magnesio
Propiedades antioxidantes
Fibra
Apenas ná de grasas
Como pasa con todas las frutas y verduras, las fresas tienen una mayor cantidad de azúcares cuanto más maduras están, y por eso es mejor consumirlas en cuanto las compramos (o lo antes posible, vaya). De todas formas, sé que sí, que a veces se nos queda ahí algo en la cocina y de que nos damos cuenta ya ha madurado. En esos casos, mucho mejor preparar una mousse de fresas y queso fresco que tirarlas o dejar que se echen a perder
Yo he hecho cuatro mousses grandes de unos 130g, pero podéis hacer 6, algo más pequeñas, y seguirán estando bien de tamaño (incluso un poco mejor). A nivel nutricional se nota poco la diferencia porque son muy poco calóricas, bajas en hidratos y en grasas (una joyita).
¡Espero que os guste!
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Mousse de fresas y queso fresco sin azúcar
Tiempo de preparación 30 minutos
Tiempo de enfriado 3 horas
Raciones 4 mousses
Calorías 54.7kcal
Autor Noelia Herrero
Ingredientes
250 g fresas sin pedúnculo
250 g queso fresco desnatado bajo en grasas
20 ml leche desnatada o vegetal
4 hojas gelatina neutra o 9g gelatina en polvo
1 cda sucralosa o edulcorante al gusto
Elaboración paso a paso
Lavamos y troceamos las fresas, retirando el pedúnculo. Las trituramos hasta obtener un puré fino y lo colamos para quitar las semillas.En un bol, batimos este puré junto con el queso fresco bien frío.
Hidratamos la gelatina neutra en agua (2-3min), calentamos la leche al microondas y la disolvemos en ella, bien escurrida. Dejamos atemperar un par de minutos.
Añadimos la leche con gelatina al bol de las fresas y batimos bien, intentando conseguir muchas burbujitas.
Vertemos la mezcla de nuestra mousse de fresa y queso fresco en vasitos individuales y dejamos enfriar durante 3h en la nevera.
Servimos, ¡y listo!
Información Nutricional
Ración: 130g | Calorías: 54.7kcal | Carbohidratos: 7.3g | Proteina: 4.9g | Grasa: 0.4g | Grasa Transgénica: 1.2gFuente: este post proviene de Dulces Diabéticos, donde puedes consultar el contenido original.
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