Lo primero de todo, ¡¡feliz año y feliz Día de Reyes!! Me habría encantado haber podido publicar este post algunos días antes, ¡qué digo días: semanas! Antes incluso de que terminara el año, pero las circunstancias mandan. El inicio de 2021 no ha sido el más deseable en mi casa. Siempre decía que era difícil que el nuevo año fuese peor que el que dejábamos atrás, pero sí, aún podía empeorar. Afortunadamente, desde hoy estamos todos en casa. Empieza una nueva etapa. Una etapa diferente, pero con la esperanza puesta en que poquito a poco irá a mejor.
Y como preparar una nueva entrada para el blog me entretiene y me distrae, y tener otra vez a mi abuela en casa sube el ánimo, he aprovechado un ratito de esta tarde para dejaros por aquí unos muffins salados, cuya receta os prometí hace un par de semanas a través de mi perfil en Instagram.
La miga está cargada de jamón curado, pedacitos de higos secos (me rechiflan) y trocitos de las mejores compis de los higos: las nueces.
No me enrollo mucho más por hoy. ¡Feliz tarde!
Muffins salados de jamón, higos y nueces:
Receta adaptada de Giallo Zafferano.
INGREDIENTES (para 4 muffins grandotes o 6 de tamaño normal)
2 huevos
30mL de aceite de oliva virgen extra
50mL de vino blanco
120g de harina de trigo
30g de maicena
12g de levadura química en polvo
1/2 cucharadita de sal
50g de queso emmental recién rallado
70g de higos secos, bien picados
70g de jamón curado, cortada en dados
30g de nueces, picadas groseramente
Mermelada de higos, para decorar
PREPARACIÓN
Precalentamos el horno a 180ºC.
Tamizamos en un cuenco amplio la harina, la maicena, la levadura y la sal.
Por otro lado, en un cuenco, batimos los huevos con el aceite de oliva y el vino. Vertemos esta mezcla sobre la anterior. Mezclamos desde el centro con las varillas hasta que todos los ingredientes se incorporen.
Agregamos el queso rallado, y mezclamos.
A continuación, los higos, el jamón y las nueces. Integramos con suavidad con la ayuda de una espátula.
Repartimos la mezcla entre cuatro o seis cápsulas de muffins, y horneamos 22-25 minutos a 180ºC. Dejamos enfriar sobre una rejilla y extendemos una cucharadita de mermelada de higos sobre la superficie de cada uno. Los podemos consumir a temperatura ambiente o recién hechos. Recién hechos están espectaculares. Al día siguiente, pierden un poquito.
Fuente: este post proviene de Mi recetario por Elena Pilar, donde puedes consultar el contenido original.
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