Bon appétit amig@s,
Un clásico de la repostería norteamericana conocido mundialmente. Hay muchísimas recetas pero esta es la que más me gusta hacer porque utilizo un molde bajo rectangular por lo que las porciones son más bajitas y la mezcla de sabores de las galletas trituradas de la base y el queso queda ideal.
Para rematar me gusta poner por encima un coulis de fresas, frambuesas, melocotón u otra fruta antes de meterla al horno para que el sabor de la tarta quede todavía más rico.
Es una tarta muy sencilla de preparar y nos llevará muy poquito tiempo hacerla. Se conserva perfectamente unos días en la nevera y es muy útil cuando tenemos que preparar un postre con antelación ya que es ideal prepararla un día antes, guardarla en la nevera y sacarla en el momento de servir.
Ingredientes :
Para la base:
200 gramos de Galletas tipo María
100 gramos de Mantequilla fundida
Para el coulis de fresas:
150 gramos de fresas
20 gramos de azúcar
Para el relleno:
400 gramos de queso crema tipo Philadelfia
80 gramos de Azúcar
20 gramos de Harina
1 Huevo
40 ml de Nata (crema de leche)
Encendemos nuestro horno a 170 grados para que se vaya calentando.
Empezamos por preparar la base: trituramos muy bien las galletas y añadimos la mantequilla fundida. Mezclamos y lo vertemos en nuestro molde. Yo utilizo uno rectangular y lo forro con un papel horno para que sea más fácil luego desmoldarlo.
Aplastamos bien toda la base (yo me ayudo de un vaso) y la reservamos en la nevera mientras seguimos con la receta.
Para hacer el coulis solo tenemos que triturar las fresas con el azúcar. En este caso he utilizado fresas congeladas que había sacado del congelador una hora antes.
Para el relleno mezclamos primero el queso crema, el azúcar y la harina. A continuación añadimos el huevo y la nata (crema de leche).
Ponemos este relleno sobre la base de galletas y por encima esparcimos un poco de coulis.Con un palillo hacemos unos dibujos sobre el coulis.
Ponemos nuestro molde en otro más grande ya que vamos a cocerlo al baño maría. Rellenamos el molde grande con agua caliente hasta más o menos la mitad del otro molde y horneamos a 170 grados durante unos 30 minutos.
Dejamos enfriar y reservamos en la nevera por lo menos una hora antes de desmoldarlo y cortarlo en porciones.
¡¡Una delicia!!
Bon appétit mama