Ingredientes: Para 2 porciones
Sémola: 200g
Leche: 400cm3
Sal:1 pizca
Yemas de huevo: 2
Manteca: 50g
Queso rallado: 3 cucharadas
Para la salsa blanca
Leche: 1 taza
Manteca: 1 cucharada
Fécula de maíz (maicena): 1 cucharada
Sal: 1 pizca
Pimienta: 1 pizca
Nuez moscada: 1 pizca
Paso 1: En una cacerola poner a calentar la leche con una pizca de sal, cuando esté a punto de hervir agregar la sémola en forma de lluvia para evitar grumos. Mezclar hasta que tome consistencia y retirar del fuego.
Paso 2: Agregar las yemas de huevo y revolver, incorporar la manteca y una cucharada de queso rallado. Seguir revolviendo unos instantes hasta que se integre todo.
Paso 3: Estirar la pasta de sémola en una fuente o bandeja y aplastar hasta que quede de aproximadamente 1,5 cm de espesor. Dejar enfriar.
Paso 4: Con un cortante o simplemente con la tapa de un frasco, cortar los ñoquis de la forma que querramos.
Paso 5: Yo hago la salsa blanca con maicena porque me resulta más liviana, pero la pueden hacer con harina si prefieren. Para esta salsa blanca disuelvo la maicena en la leche fría, y en la cacerola derrito la manteca. Le agrego la sal, la pimienta y la nuez moscada. Dejo hervir a fuego suave unos minutos, revolviendo constantemente con cuchara de madera hasta que llegue se ponga espesa (si paso la cuchara por el fondo de la cacerola se hace una división clara en la salsa).
Paso 6: En el piso de una fuente poner un poco de salsa blanca y colocar los ñoquis. Bañarlos con la salsa blanca, con el pesto de tomates secos o con la salsa que prefieran. Agregar queso rallado por encima y llevar a horno fuerte por 15 minutos. ¡Comer bien calentitos!