De nuevo, y otro año más, celebramos el #DiaMundialdelPan. Se trata de un alimento tan básico del que no podríamos prescindir. Y es un alimento de vital importancia en todos los países del mundo, teniendo en cada uno de ellos variedades diferentes. Alemania es un país tradicionalmente panarra. Las veces que he podido visitar el país he alucinado dentro de sus panaderías, y, al contrario de lo que pasa en España, se puede comer pan muy bueno. Lástima que aquí o hacemos pan casero o no comemos buen pan, ya que se esté perdiendo la tradición de hacer pan casero en la mayoría de las panaderías....Quizás este no sea el más característico de los panes alemanes, en los que predomina la harina de centeno. Pero es un pan elaborado con cerveza negra, muesli y al cincuenta por ciento harina de fuerza y harina de trigo integral, un pan muy aromático y sabroso, con toques dulces que le provoca la fruta que lleva el muesli y la miel que cuenta también entre sus ingredientes. Hace años que no hacía esta receta, de la que fui fan en mis comienzos panarras y que le vi a Vanesa Sierra. De nuevo me he decidido a prepararlo para celebrar una ocasión tan especial. Lo he horneado en una olla tipo Pyrex, con lo que nos ahorramos el segundo levado, ya que al meter el pan con el horno frío, se produce un levado gradual, conforme va cogiendo temperatura el horno. Todo ello posibilita realizar el pan en poco tiempo, y para los principiantes se convierte en una buena alternativa a panes más laboriosos y con más dificultad.
INGREDIENTES:
250 gr. de harina de fuerza
250 gr. de harina integral
200 ml. de cerveza negra
150 gr. de muesli (el mío con frutas, comprado en Mercadona)
150 ml. de leche (la mía semidesnatada)
20 gr. de levadura fresca de panadero o 7 de levadura instantánea de panadería
20 ml. de aceite de oliva virgen extra
20 ml. de miel
1 y 1/2 cucharadita de sal
PREPARACIÓN:
Os voy a dejar la receta de forma tradicional y en la thermomix, que es como la he hecho yo, aunque reconozco que el amasado de la thermomix no me convence en exceso, prefiero hacerlo en amasadora. o a mano. En un bol ponemos las harinas y la sal, removemos bien. Vamos añadiendo la cerveza poco a poco sin parar de amasar. Después añadimos el aceite y la miel. Disolvemos la levadura en la leche y, por último, se la vamos añadiendo a la masa. Batimos durante diez minutos, y es entonces cuando añadimos el muesli, amasamos un poco más hasta conseguir una masa elástica. Dejamos levar en un bol aceitado hasta que doble su volumen.
Si vamos a amasar en la Thermomix procederemos de la siguiente forma: echamos en el vaso el aceite, la miel, la leche, la levadura y la cerveza, y programamos 2 minutos, temperatura 37º, a velocidad 2. Añadimos las harinas y la sal y mezclamos 10 segundos a Velocidad 6. Por último echamos el muesli y programamos 3 minutos Velocidad Espiga. Dejamos levar dentro de la cubeta hasta que doble su volumen.
Sacamos la masa, desgasificamos un poco y damos forma de hogaza. aceitamos un molde tipo Pyrex y su tapa. En la tapa dejamos con cuidado la hogaza, hacemos unos cortes y tapamos con el molde. Metemos en el horno a 230º (sin precalentar) durante unos 45 o 50 minutos. Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.
Con esta receta participo en el World Bread Day de este año, si queréis seguir todas las propuestas podréis hacerlo en Facebook, en Pinterest y en Twitter con el hastag #wbd2014.
Feliz día mundial del pan.
Lidia.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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