El pasado fin de semana, lo pasamos en Sevilla, y probé un pastel de carne de lo más original, como no había probado otro, entre otras cosas porque no llevaba carne picada, si no carne del puchero. Me gustó tanto tanto, que ni corta ni perezosa voy yo y le pregunto al camarero si el cocinero podría decirme la receta, y directamente me dijo que no, que no me la daba porque era secreta.
Pero vamos, que si el camarero pensaba que ahí terminaba mi búsqueda, andaba listo. Ni tres días han pasado y ya estaba poniendo yo un puchero, había apuntado los ingredientes que ví y saboreé y ya sólo me quedaba llevarla a la práctica y probar a ver si salía.
Y tengo que decir que salió de consistencia y sabor como recordaba, lo más parecido creo, que podría salirme sin tener ninguna referencia, tan sólo mi sabor y memoria.
Previamente hacemos un puchero [o cocido] con carne de ternera, pavo y pollo, y las verduras que acostumbréis, yo le pongo zanahoria, apio, nabo, puerro y patata. Cuando esté listo, apartamos la carne y la desmenuzamos como para croquetas. Reservamos.
En una sartén ponemos a calentar un chorro de aceite de oliva virgen. Echamos una cebolla picada y cuando se ponga transparente, añadimos un diente de ajo picadito, un puñado de guisantes y otro de habitas [ambos congelados], rehogamos hasta que empiece a dorarse, ponemos un poco de sal y agregamos la carne que tenemos reservada. Refreimos todo junto durante unos 5 minutos. Apartamos.
Mientras se está haciendo este refrito de carne, en un bol batimos dos huevos grandes, medio brick de leche evaporada Ideal, media cucharadita de curry y media cucharadita de comino. En este bol, vertemos encima el refrito de carne que habíamos apartado y ligamos todo bien.
Forramos con papel de horno un molde alargado de cake y ponemos dentro nuestra mezcla. Introducimos en el horno que estará precalentado [tapando un poco por encima con el papel sobrante] a 200º durante 30 minutos.
Sacamos y ponemos en una fuente. Se puede tomar caliente o frio, y así sólo o acompañado de salsa.
Para la salsa: Rehogamos en un poco de aceite de oliva, un puerro grande cortado en trocitos pequeños hasta que se empiece a dorar, entonces le añadimos medio brick de tomate frito natural, un chorreón de brandy y una cucharadita de bovril. Mezclamos unos minutos en la sartén y después le agregamos 150 ml de leche evaporada Ideal. Batimos con la batidora y listo para servir.
Si veis que ya no os apetece poner un puchero expresamente para hacer este pastel por el calor, dejadlo en pendientes para cuando llegue el frio, os aseguro que no os vais a arrepentir, es un pastel de carne diferente y con un sabor especial, riquísimo! Ya me contaréis.
Fuente: este post proviene de Un poquito de Rocío, donde puedes consultar el contenido original.
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