Desde sus inicios laborales, sabía que esos casos eran los que le harían triunfar. Y él no quería morirse de asco en un juzgado de provincias, defendiendo a cuatro desgraciados
Prefería estar en el ojo del huracán
Así es como llegó a la judicatura, a lo más alto. Pero estar en lo más alto tenía sus secretos y él tenía muchos y muy escondidos
Como abogado ya había tenido que hacer pactos que le revolverían las entrañas a cualquiera, a él no
La política también se colaba por los pasillos de los juzgados. Las presiones se hacían sentir a golpe de teléfono, con advertencias veladas, favores y falsas sonrisas. Él siempre había estado abierto a todo eso
Era el precio a pagar por una carrera meteórica y poder relacionarse con lo más granado del país
Había aprendido, a la fuerza y con gusto, a dejar sus escrúpulos en su casa
No se casaba con nadie, seguía sus propios criterios. Esricto, poco adaptado a los tiempos y muchos otros calificativos eran los que le dedicaban
Su afán por estar siempre en boca de todos le había llevado hoy por la puerta trasera de los juzgados
Lo había sacado los guardias de seguridad, por su propio bien
Después de pasarse horas atrincherado, no le había quedado otra
Esta vez había ido demasiado lejos
Leer la sentencia de aquel juicio y que las cosas se torcieran, fue todo uno
No había calculado bien las consecuencias de aquel caso. Sabía que sería polémico, pero a eso ya estaba acostumbrado. Lo que no preveyó es la furia con que la gente iba a reaccionar
Pero no iba a conseguir que aquella niñata acabara con el futuro de aquellos chicos. Ya sabía en lo que podía acabar una noche de alcohol y sexo. Luego venían las lamentaciones, el circo
Pero eso no ocurriría en su juzgado, ni tampoco esta vez
Y ahora se veía saliendo por la puerta de atrás, humillado, insultado y señalado
Desde ese momento, el teléfono no dejó de sonar. Los que le habían aupado, estaban dispuestos a dejarlo caer
Su propia hija le había insultado hacía tan solo un momento. Su mujer le dijo lo que no se había atrevido a decirle en treinta años
Y en las noticias se sucedían las imágenes de manifestaciones que no cesaban
Era la primera vez que sentía que el poder se le escapaba de las manos
Algo estaba cambiando a su pesar
PD #noesno
INGREDIENTES
4 patatas medianas
100 g de jamón dulce a taquitos
80 g de queso parmesano rallado
1 cucharada de mantequilla
4 cucharadas de nata (crema de leche) para cocinar
Sal
Pimienta
Queso para gratinar
Agua
ELABORACIÓN
Limpiar las patatas, no pelar
Poner la rejilla en la cubeta, colocar las patatas encima
Verter agua hasta cubrir por la mitad las patatas
Menú cocina 12
Dejar despresurizar
Dejar templar
Cortar las patatas por la mitad
Vaciar el centro
Chafar la carne de las patatas con la mantequilla, el queso parmesano, la nata (crema de leche) y el jamón dulce
Salpimentar
Rellenar con esta masa cada mitad de patata
Espolvorear con queso rallado
Colocar en la Cecofry sin la rejilla
Cocinar hasta que se dore y funda el queso
Receta adaptada de Mis cosillas de cocina