RECETA DE PECHUGAS DE POLLO EN SALSA DE PESTO
Yo encontré, entre los productos el pozo extratiernos, unas pechugas que me encantaron para elaborar este plato. ¡Quedaron jugosísimas! La elaboración de esta receta es tan fácil que la puede preparar cualquiera, aunque no tenga ningún conocimiento de cocina. Así que animaros a hacer este pollo y salsa pesto.
Como acompañamiento, podéis preparar estas patatas al horno o patatas asadas muy crujientes y sin aceite. Si no queréis patatas, os animo a hacer esta ensalada de aguacates con salsa de naranja como primer plato. Y ahora, vamos allá, amigos, ¡al lío!
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Ingredientes
Para 4-6 personas.3 pechugas de pollo.
3 lonchas de bacón por pechuga.
Sal.
Pimienta blanca.
PARA LA SALSA PESTO:
150 ml aceite de oliva.
35 g de piñones.
45 g de queso parmesano.
40 g de albahaca.
Sal.
Pimienta negra.
1/2 ajo.
1 chorrito de limón.
RECETA DE PECHUGAS DE POLLO EN SALSA DE PESTO PASO A PASO
CÓMO HACER LA RECETA DE PECHUGAS DE POLLO EN SALSA DE PESTO
Comenzamos nuestra receta de pechugas de pollo en salsa pesto.
Salpimentamos nuestras pechugas por todos los lados.
Les hacemos unos cortes sin llegar hasta el fondo.
Eso sí, que entre corte y corte haya una distancia de unos 2 o 3 centímetros.
De esa forma, cada pechuga de pollo tendrá unos 3 cortes, más o menos.
Ahora cogemos una bandeja de horno y colocamos dentro las pechugas.
Precalentamos el horno a 180º.
Ponemos bacón en el interior de todos los cortes que le hemos realizado a las pechugas.
Si os apetece, podéis rellenar las hendiduras con calabacín, berenjena, queso, tomate, por ejemplo.
Es decir, lo podéis rellenar con lo que más os apetezca o guste.
Yo he usado bacón porque le da un toque de sabor fantástico.
Introducimos la bandeja en el horno, dejándola a altura media.
Cocinamos el pollo durante unos 30 o 35 minutos, aproximadamente, a 180º con calor arriba y abajo.
Que esté más o menos tiempo dependerá del grosor de nuestras pechugas de pollo en salsa pesto.
Mientras se cocinan, vamos haciendo nuestra salsa pesto.
Ponemos en un vaso para triturar el aceite, los piñones, 1/2 diente de ajo, las hojas de albahaca, el queso parmesano, la pimienta negra molida y un poco de sal.
Introducimos el brazo eléctrico en el vaso y trituramos. Luego, echamos unas gotas de limón.
Ojo, poquito porque el limón es para que la albahaca conserve su color y no se oxide.
Removemos todo bien y reservamos hasta que el pollo con salsa pesto estén en su punto.
Esto será cuando miremos los cortes y la carne esté hecha.
Sacamos, colocamos en un plato, le agregamos la salsa y a disfrutar de estas ricas pechugas de pollo en salsa de pesto.
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