Quería hacer una versión muy especial del risotto para estas fiestas, y por ello que aparezca el cava y las gambas entre los ingredientes de este plato. Podéis hacerlo con gambas o con langostinos, ambos hacen que quede un risotto especialmente sabroso.
Creo que este risotto es perfecto para una comida o cena en pareja o en petit comité. Aprovechad las celebraciones navideñas para ponerlo en práctica y disfrutar con él. Abajo os explico cómo hacerlo paso a paso y os aseguro que os va a salir un risotto meloso para chuparse los dedos.
La técnica del risotto no es complicada pero sí que requiere nuestra atención durante unos 20-25′ en los que tenemos que ir removiéndolo para conseguir esa textura untuosa tan característica del risotto. Además, al final de la cocción se le puede añadir un poco de mantequilla para acabar de mantecar el risotto aunque no es estrictamente necesario. Por último, se le añade queso parmesano en polvo, en forma de lascas o porque no un crujiente de queso parmesano para estilizar el emplatado.
Una vez que aprendáis a hacer este risotto seguro que os apetece repetir y probarlo con otros ingredientes, la verdad que el risotto admite casi de todo y es un plato perfecto para dar salida a lo que nos quede en la nevera ya sea carne, pescado o verduras. Os dejo, además, otras recetas de risottos que os pueden interesar y que encontraréis en el blog: Risotto de champiñones y trigueros, Risotto de calabaza y Risotto de pollo con peras al vino.
¡Vamos a allá!
Risotto de Gambas al Cava
¿Quieres preparar el mejor risotto estas navidades? La receta que os he preparado es sin duda de las más ricas, un Risotto de Gambas al Cava súper meloso.
¾ taza (160g) de arroz arborio, carnaroli o redondo
12 langostinos o 20 gambas crudas
1/2 cebolla finamente picada
1/2 taza de cava o vino blanco
3 tazas (750 ml) de fumet de pescado o agua
¼ taza de queso parmesano rallado
sal y pimienta al gusto
Mantequilla de langostinos o gambas (opcional)
200 g de mantequilla
1 zanahoria finamente picada
1/2 cebolla finamente picada
2 hojas de laurel
2 rama de perejil
Mantequilla de langostinos o gambas (opcional)
Coloca una sartén al fuego con 2 Cdas. de aceite y sofríe la cebolla, la zanahoria, el laurel y el perejil durante unos 4- 5. Entonces añade las cabezas y las pieles de los langostinos o gambas, con una espátula o cuchara aplasta las cabezas para que saquen sus jugos. Si quieres puedes echar ¼ taza de coñac y flambear para que le dé más aroma. Ahora después la mantequilla (mejor si es mantequilla clarificada) y cocina durante 10 a fuego bajo. Después se tritura todo bien con la batidora y luego se tamiza para con un colador o estameña para obtener solo la mantequilla líquida. La colocamos en el recipiente que queramos y la guardamos en la nevera. Si no vamos a gastarla en los próximos 4 días podémos congelarla.
Para hacer el Risotto
Pocha la cebolla en una cazuela o sartén con 2 Cdas. de aceite hasta que esté transparente.
Añade el arroz y tuéstalo a fuego medio-alto entre 4-5, removiendo constantemente. Notarás que está listo porque comenzará a ponerse transparente.
Es el momento de agregar el caldo o agua bien caliente, añádelo taza a taza y removiendo el arroz constantemente. Deja que el caldo se consuma antes de incorporar la siguiente taza. Cuando añadas la última taza de caldo incorpora también los langostinos o gambas peladas. El proceso completo durará entre 15-20 dependiendo del tipo de arroz.
Cuando el arroz esté al dente, retíralo del fuego y añade 3 Cdas. de mantequilla normal o de gambas si la has hecho. Seguidamente echa el queso parmesano rallado y remueve para que se amalgamen todos los ingredientes.
Prueba el punto de sal y deja reposar el risotto tapado durante 2. Puedes presentar el plato como quieras. Yo he decorado el plato con unos puntos de alioli, un crujiente de queso, un langostino a la plancha y cebollino. Listo para servir.
Alioli de aguacate
Apasta 1/2 aguacate con un tenedor y mézclalo con 1/2 taza de aliol.
Crujiente de parmesano
Coloca una sartén antiadherente al fuego sin nada de aceite y echa un poco de queso parmesano rallado. Deja el queso hasta que funda y espera a que tome color, entonces aparta del fuego y con ayuda de unas pinzas o tenedor saca el crujiente y déjalo sobre un papel absorbente o de horno hasta que se enfríe y se quede crujientw.
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