La receta la descubrimos en una clase especial de navidad de thermomix hace algunos años, y desde entonces, no falta en nuestra cocina: porque nunca falla, la carne queda en su punto, porque la podemos preparar con antelación (e incluso congelar), porque puede ser un plato para una celebración, porque nos encanta a todos el punto que le da el romero fresco a la carne... en fin, que no faltan argumentos para probarlos!!!
Ingredientes:
800 gr. de agua
2 kg. de sal gorda
2 solomillos de cerdo ibérico (recomiendo los ibéricos, se nota la diferencia)
10-12 hojas de laurel
2 ramilletes de romero fresco
Una pizca de nuez moscada
1.- Poner el agua en el vaso y programar 8 minutos, Varoma, velocidad 1, o hasta que alcance la temperatura. Mientras, condimentar con nuez moscada el solomillo y envolver con laurel y las hojas de romero (si es necesario, atar con hilo de bramante)
2.- Rellenar el fondo de la Varoma con sal gorda, colocar los solomillos y cubrirlos completamente con más sal. Quitar el cubilete y situar el recipiente Varoma en su posición, programando 40 min., Varoma, velocidad 1.
(La receta original marca 25 minutos, pero a nosotros nos gusta la carne que quede bien hecha, así que para dos solomillos ponemos 40 min. y nos queda jugosa, pero hecha)
3.- Acabado el tiempo, dejar que baje la temperatura, retirar la costra de sal, cortar el hijo (si lo hubiera), retirar el resto de sal y hierbas y cortar en rodajas el solomillo (siempre lo cortaremos mejor en frio)
Podemos aprovechar el calor del Varoma para colocar unas patatas lavadas y SIN pelar en el cestillo mientras cocinamos el solomillo, cocinándolas unos 20 min. antes de que termine el tiempo.
Acompañar con compota de manzana, salsa chutney, puré de patatas cremoso o la guarnición que más nos guste.
Por supuesto, podemos hacer estos solomillos sin utilizar la thermomix, cubriendo de sal y cocinando en nuestro horno tradicional.