Bizcochela, aunque yo la he variado un poco.
Se trata de una tarta de manzana rápida, para esos días en que no te quieres complicar mucho la vida y te apetece algo dulce. Yo aproveché a que el horno estaba caliente de otra receta dulce y decidí hornear esta ricura.
Si veis las fotos del blog original a mí me ha quedado más hecha por dentro, pero con ese punto de jugosidad que contrasta muy bien con la capita crujiente de azúcar y canela que caracteriza esta tarta.
Ideal para tomarla como merienda, postre, con nata (crema de leche), con sirope de caramelo...yo pienso comerme un trocito con una bolita de helado. y vosotros? :)
Ingredientes:
1 manzana
1 taza grande de harina de espelta
1 cucharadita de levadura royal
1/2 cucharadita de sal
1/2 taza de azúcar
1 cucharada de canela
5 cucharadas de mantequilla a temperatura ambiente
1 huevo
1/ 2 taza de leche entera
1 cucharadita de esencia de vainilla
Elaboración:Precalentamos el horno a 200º parte de abajo.
En un bol mezclamos la harina con la sal y la levadura. En otro más pequeño mezclamos la canela con la mitad de la azúcar. En un recipiente apto para batir, añadimos la mantequilla junto con la otra mitad del azúcar, el huevo, la esencia de vainilla y la 1/2 taza de leche. Batimos. Le vamos añadiendo la mezcla de la harina poco a poco sin dejar de batir.
Cortamos la manzana en láminas o rodajas. Engrasamos un molde con mantequilla y vertemos la mitad de la masa. Después colocamos todas las rodajas de manzana por encima cubriendo toda la masa, y espolvoreamos con mitad de la mezcla de azúcar y canela. Después agregamos lo que nos queda de masa, intentando que cubra toda la superficie del molde y que quede uniforme, y volvemos a espolvorear con la restante mezcla de azúcar y canela.
Horneamos 30 minutos. Apagamos el fuego y reservamos.