INGREDIENTES para 4 personas
5 huevos
500 gr. de patatas (el peso es de patata ya pelada)
Aceite de oliva
Sal
ELABORACIÓN
Se cortan las patatas en láminas pequeñas (como haciendo sopas), o en cubitos o láminas, eso es al gusto de cada cual. Lo importante es que sea en trocitos regulares para que se frian por igual.
Se fríen muy despacio en la sartén con un chorretón de aceite que las cubra y moviéndolas de vez en cuando para que no se agarren. De este ‘confitado’ de la patata depende el éxito del plato. La patata queda cremosa y blanda en el interior pero dorada y crujiente en las zonas más finas del exterior.
Una vez hechas se dejan escurrir muy bien del aceite, se sazonan entonces con sal fina (hay que probarlas para comprobar el punto de sal) y se pasan a un bol en donde estarán los huevos muy bien batidos (tienes que estar esponjosos) y sazonados también.
Llevamos la mezcla a una sartén antiadherente un poco honda en la que habremos puesto un chorrito de aceite de oliva que movemos por todo el fondo y paredes de la sartén. Se revuelven a fuego rápido con un tenedor o una paleta y cuando empiece a cuajarse, prescindimos del tenedor y haremos a la sartén un movimiento de vaivén hasta que esté cuajada la tortilla.
Cubriremos la sartén con un plato, dándole la vuelta recogiendo así la tortilla en el plato. Pasaremos la tortilla de nuevo a la sartén y la haremos por el otro lado pero no la dejaremos ya mucho tiempo si deseamos que la tortilla esté jugosa.
Con cebolla
Para las mismas cantidades de la receta anterior, freímos una cebolla pequeña cortada a lascas en una sartén aparte de las patatas. Esta es la mejor manera de controlar bien la fritura y el punto de la cebolla. Lo mejor es poner poco aceite y hacer un rehogado. Luego puedes cuajar la tortilla en esa misma grasa. Lo mezclamos todo bien con la patata frita y seguimos las instrucciones de la receta base para confeccionar la tortilla.
Si prefieres freír la cebolla junto con la patata tendrás que ponerlas al final, a falta de un par de minutos para que la patata esté hecha.
CONSEJOS Y TRUCOS
Una forma de hacer una tortilla jugosa y tierna, es hacer dos tortillas en dos sartenes a la vez, mitad y mitad, así podemos controlar el cuajado en la superficie y luego las uniremos de manera que una sea la cubierta de la otra, por las caras que no han estado al fuego y dándole después una ligerísima pasadita por las dos caras nos quedara la unión de las dos tortillas perfecta.
Las sartenes para hacer tortillas no se deben lavar con agua y jabón, solamente limpiarlas cuando aún están calientes con papel absorbente de cocina y dejarlas así hasta el próximo uso.
Si no te gusta que la patata esté crujiente en el interior deja reposar la mezcla de huevos y patatas unos 10 minutos antes de cuajar la tortilla para que se empape bien la patata y se enternezca.
Otro truquillo para que la tortilla quede jugosa y dorada es poner un chorrito de leche (o crema de leche) en los huevos al batirlos.
También hay quien separar las yemas de las claras para batir éstas casi a punto de viene. Así se consigue mayor esponjosidad.
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