Hoy os traigo una salsa muy versátil que en casa nos encanta, se trata de una salsa griega que aprendí en mis tiempos mozos.
Me reitero en deciros que es muy versátil porque la podéis utilizar para la salsa de un kebap casero (proximamente en el blog), para picotear unas verduras crudas o simplemente para untar en un trozo de pan tostado... uhmmmm riquísima.
Ingredientes.-
Un ajo grande
Un pepino grande
Dos yogures griegos naturales sin azúcar
Dos cucharadas de aceite de oliva
Un poquito de pimentón picante
Sal
Preparación.-
Rallamos el pepino en un plato hondo y le añadimos sal, en una media hora habrá soltado mucho líquido.
Mientras el pepino va soltando el agua, picamos el ajo.
Con ayuda de las manos o un colador grande, escurrimos el agua que haya soltado el pepino, cuando esté bien escurrido lo pondremos en un plato.
Añadimos el ajo y el yogur.
Pondremos un poquito de pimentón picante (esto es opcional, aunque le da un puntito muy rico).
Batimos bien para que todo quede bien mezclado.
Añadimos el aceite de oliva y un poquito de sal y volvemos a batir para que todo quede bien integrado.
Ya lo tenemos, lo pondremos a enfriar un par de horas en el frigo.
A la hora de servir podemos poner un chorrito de aceite de oliva por encima y un poco de pimentón picante.
A disfrutar.
Fuente: este post proviene de Cocinando para cien mil vikingos, ¿Qué hago de comer hoy?, donde puedes consultar el contenido original.
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