No es la tarta en sí, sino que he adaptado la receta para que pudiese saborearse en vasitos. La verdad es que he tenido que pensarlo bien porque lo bueno del banana toffee es el intenso sabor a plátano ya que está hecho con rodajas de esta fruta. Sin embargo, meterlas en los vasitos no iba a quedar tan bonito y lo he sustituido por una mousse de plátano.
¡Qué decir de esta mousse! Es ligera y está buenísima. La vedad es que ha sido todo un descubrimiento. Además, es muy fácil de hacer y no se necesitan muchos ingredientes. Seguro que si os gusta el plátano os encanta esta mousse.
De esta forma no me dejaba ni un solo ingrediente de la tarta original: base de galleta, (mousse de) plátano, dulce de leche o toffee y nata (crema de leche). ¡Ah y chocolate!
Voilà!
Yo he optado por hacer unas cucharillas de chocolate, dándole un toque más chulo con ellas, pero podéis sustituirlas por pepitas, fideos, sirope... lo que se os ocurra, vaya. Además, también he cubierto con chocolate los bordes de los vasitos para darle el toque final al plato. De esta manera, cuando se acaba el interior no significa que has terminado. No. Ni mucho menos. ¡Aún te quedan los bordes de chocolate!
Vasitos de Banana Toffee
Dificultad: Fácil
Raciones: 10 vasitos
Etiqueta: Aperitivo Dulce
10 galletas maría
10 galletas de chocolate
500 gr de plátanos
500 ml de nata (crema de leche) para montar (35% m.g.)
80 gr de azúcar blanco
Zumo de un limón
200 gr de dulce de leche
150 gr de chocolate negro (opcional)
Fideos de chocolate (opcional)
Preparación:
- Para empezar, fundimos el chocolate negro al baño maría, con cuidado de que no se nos queme. Vamos controlándolo. Lo mejor para ir removiéndolo es una espátula de plástico.
- Cuando tengamos el chocolate fundido lo pasamos a un plato hondo. Llenamos un plato hondo también de fideos de chocolate.
- Vamos metiendo los bordes de los vasitos para que se impregnen de chocolate y después los metemos en el plato de fideos de chocolate para que se queden pegados. Con los dedos y con cuidado vamos presionando los fideos para que se queden bien pegados y de forma uniforme.
- Metemos los vasitos en el frigorífico durante al menos media hora.
- Con el chocolate sobrante podemos hacer cucharillas de chocolate. El molde que utilicé es de Maisons du Monde.
Mousse de plátano y nata (crema de leche)
- Vamos montando la nata (crema de leche) con las varillas. Cuando esté casi montada, añadimos el azúcar y dejamos que se mezcle bien y se acabe de montar. Cuidado cuando batáis la nata (crema de leche): si la batís demasiado se cortará.
- En el cuenco de la batidora de cocina, metemos los plátanos y el zumo de limón. Batimos bien hasta conseguir un puré, una mezcla homogénea.
- Mezclamos un poco más de la mitad de la nata (crema de leche) con el puré de plátano. Lo mezclamos con movimientos lentos y envolventes, utilizando la espátula.
- Metemos la nata (crema de leche) y la mezcla de nata (crema de leche) y plátano en la nevera durante al menos 30 minutos.
Montaje:
- Sacamos los vasitos del frigorífico. Nos cercioramos de que el chocolate esté sólido.
- Cogemos las galletas y las vamos partiendo en trocitos pequeños e introduciendo en los vasitos. No deben ser migas. Tenemos que utilizar una galletas maría y otra de chocolate por vasito.
- Sacamos la mousse de plátano y rellenamos una manga pastelera con boquilla redonda (podéis prescindir de la manga, pero es más incómodo; también podéis simplemente cortar la punta de la manga y no usar boquilla).
- Echamos mousse de plátano hasta un poco más de la mitad.
- Ahora toca rellenar con dulce de leche. Llenamos casi hasta el borde de chocolate. Podéis utilizar la manga pastelera también, será más fácil.
- Terminamos con un poco de nata (crema de leche). Yo he utilizado una boquilla con forma de estrella.
- He coronado los vasitos con una cucharita de chocolate, pero podemos poner pepitas, fideos, sirope...
- Servimos en frío.
¡A disfrutar!
- La nata (crema de leche) es importante batirla siempre en el mismo sentido y con un ritmo uniforme, de esa manera habrá menos posibilidades de que se corte. Si se corta, seguir batiendo para por lo menos conseguir mantequilla dulce.
-El zumo de limón sirve para que los plátanos no se oxiden tan rápidamente.
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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