Receta de brownie de chocolate con Kínder
Plato: Postres
Cocina: Americana
Dificultad: Fácil
Raciones: 8 raciones
Calorías por ración: 625 kcal
Tiempo total: 45 minutos
Ingredientes para brownie
Para el bizcocho
250 gr de chocolate para fundir 60% de cacao
120 gr de mantequilla
3 huevos L (165 gr)
100 gr de azúcar blanca
100 gr de azúcar moreno
90 gr de harina de trigo
1 cucharada de postre de esencia de vainilla
120 gr de nueces troceadas
1/2 cucharadita de sal
Para decorar:
40 gr de chocolate con leche para fundir
40 gr de chocolate blanco para fundir
2 barritas de kínder bueno
Receta de brownie esponjoso
Derrite el chocolate del bizcocho al baño maría. Para ello, llena un cazo con agua y ponlo al fuego. Encima pon otro recipiente cuya base toque el agua pero que los laterales sean lo suficientemente altos para que no entre agua al chocolate.
Remueve con una lengua de silicona y cuando el chocolate esté casi derretido, añade la mantequilla a temperatura ambiente y cortada en trozos pequeños para que sea más fácil de derretir.
Cuando el chocolate no tenga grumos y quede una mezcla fina, pásalo a un cuenco amplio y deja enfriar hasta el momento de utilizar.
Mientras tanto, prepara el bizcocho. Primero enciende el horno a 170ºC para que se vaya calentando. Pon los huevos, el azúcar blanco y el azúcar moreno en un bol. Si los huevos pesan más de 165 gramos, retira un poco de clara de huevo antes de meterlo en el bol.
Bate con una batidora eléctrica, aunque también lo puedes hacer a mano. Hazlo durante 5 minutos, hasta conseguir una mezcla blanquecina y que haya doblado su volumen.
La mezcla ha de quedar así, como ves en la foto, con burbujitas y con un color blanquecino. Ahora puedes añadir la esencia de vainilla y la sal, que potenciará el sabor del chocolate. Bate ligeramente con unas varillas de mano.
Incorpora pequeñas cantidades de la mezcla al chocolate que tenías enfriándose, mezcla suavemente con las varillas y así sucesivamente hasta incorporarla toda la mezcla.
Tamiza la harina sobre el mismo bol. El brownie casero no lleva levadura, así que utiliza harina de trigo común de todo uso.
Con ayuda de una lengua de silicona, mezcla la harina con movimientos envolventes y poco a poco. Haciéndolo así, te aseguras de no quitarle el aire conseguido anteriormente al batir.
Cuando tengas la harina incorporada del todo y no queden grumos en la mezcla, añade las nueces troceadas. No es necesario que queden muy picadas, mejor en trozos un poco grandes. Con la misma lengua de silicona mezcla las nueces hasta que queden bien repartidas.
Forra un molde con papel vegetal. Para ello moja el papel debajo del grifo, escurre bien el exceso de agua y cubre el molde, te será más fácil de manipular si lo haces así. Puedes usar un molde cuadrado como el mío que es de 32 x 32 cm. O escoger uno rectangular que no sea muy grande, sino quedará un brownie demasiado fino.
Incorpora la mezcla sobre el molde forrado. Dale unos golpecitos sobre el mármol para que quede bien repartida por todo el molde. Mete el molde en el horno precalentado a 170ºC entre 20-25 minutos, dependerá un poco de tu horno. En el mío tuvo que estar un poquito más de tiempo. A los 20 minutos, pincha el bizcocho y si sale muy crudo déjalo más tiempo, pero vete controlándolo para que no quede muy hecho y seco.
Pasado ese tiempo, saca el bizcocho del horno. Cuando lo pinches y salga así de manchado es que está en su punto. Parece un poco crudo, pero a medida que se enfríe quedará un bizcocho más compacto pero jugoso por dentro. Y como ves, por encima debe quedar esa capa crujiente.
Córtalo en porciones para poder decorarlo de forma individual.
Para decorar el brownie de chocolate, derrite al baño maría el chocolate con leche y después pásalo a una manga pastelera pequeña. No es necesario que lo dejes enfriar, para decorar será más fácil manipularlo caliente.
Sigue los mimos pasos para derretir el chocolate blanco.
Separa un poco las porciones entre sí y deja el papel vegetal debajo para evitar mancharlo todo. Decora primero con el chocolate blanco.
Corta las barritas de Kínder Bueno en trocitos y añádelos por encima al brownie. Se quedarán pegados por el chocolate y no se caerán.
Termina decorando con el chocolate con leche. Para que el chocolate se endurezca, mete el brownie casero en la nevera unos minutos antes de comerlo.
Consigue un brownie de chocolate esponjoso
El brownie de chocolate es un bizcocho que no sube mucho porque no lleva levadura. Lo ideal es hacerlo en un molde cuadrado o rectangular que no sea muy alto y después cortarlo en porciones.Para conseguir un brownie esponjoso, la clave está en batir los huevos y el azúcar hasta que blanqueen y doblen su tamaño. Quedará una mezcla aireada y con burbujitas.
Cuando hornees el brownie casero, hazlo a la temperatura que marque la receta. Si pones una temperatura más alta, se cocinará por fuera y, por dentro, quedará crudo.
Para que el brownie quede jugoso debe cocinarse el tiempo justo, nunca pasarse porque quedará seco. Y cuando lo pinches con un cuchillo, éste ha de salir ligeramente manchado.
A medida que el brownie de chocolate se enfríe, quedará compacto pero manteniendo su esponjosidad.
Si te gusta el chocolate y te apetece preparar otros postres en casa, puedes probar los muffins de chocolate, una receta que queda muy esponjosa y con auténtico sabor a chocolate.
Las cookies de chocolate con cacahuetes o cookies choco velvet son otro dulce que puedes dejar preparado de antemano y congelar sin hornear. Así solo sacas las que vayas a consumir ese día y las llevas al horno. Quedarán espectaculares.
Si se acerca algún cumpleaños y buscas una tarta deliciosa y que no sea pesada, prueba la cheesecake de mango con chocolate blanco. Una tarta que no lleva azúcar y te sorprenderá lo buena que queda.
¡Buen provecho, familia!