Este plato de bucatini con almejas combina una pasta larga con una de mis debilidades: las almejas al ajillo. Es muy fácil de hacer y el resultado es excepcional, ¡pruébalo!
Cantidad: 1 caldero (4 Raciones)
Tiempo de preparación: 10 minutos
Tiempo de cocción: 20 minutos
Lista en: 30 minutos
Cocina: Italiana
Plato: Segundo plato
Dificultad: Fácil Ingredientes:
600 gramos de almejas vivas
unos puñados de sal gorda (para lavar las almejas y hervir la pasta)
300 gramos de pasta larga (yo utilicé bucatini)
3 o 4 dientes de ajo
un chorrito de aceite de oliva
2 pimientas de Cayena (opcional)
1 vasito de vino blanco
unas ramitas de perejil fresco picado Instrucciones:
Cuando compres las almejas envuélvelas empapadas en agua salada y ponlas a refrigerar en la nevera hasta que las vayas a usar.
Ponlas en un bol con un puñadito de sal gorda...
... bien cubiertas con abundante agua fría para que se vayan lavando y pierdan la arena que puedan tener.
Si alguna permanece abierta, la retiras.
Preparamos la pasta. Te aconsejo que sea una pasta larga tipo espaguetis o, como en este caso, unos bucatini, que son largos pero huecos por el centro, lo que permite que se impregnen de salsa o líquido.
En un caldero grande con abundante agua hirviendo y un puñado de sal gorda ponemos los bucatini, dejando que se cuezan al dente durante el tiempo que indique el fabricante.
A la par ponemos en otro caldero amplio un buen chorro de aceite de oliva y cuando esté caliente añadimos los ajos fileteados.
Si te apetece y te gusta el picante, cuando estén dorados los ajos añades un par de pimientas de Cayena dejándolas rehogar ligeramente...
... para luego añadir el vasito de vino blanco.
Deja que evapore el alcohol y a continuación añade las almejas con cuidado para que no se fracturen las conchas.
Deja a fuego vivo con el caldero tapado durante unos minutos hasta que se abran las conchas de las almejas y entonces añade un poco de perejil picado. Reserva unas ramitas picadas para la decoración final.
Cuando la pasta esté hecha la vas vertiendo en los platos individuales...
... para luego echar por encima, con un cucharón, el guiso de almejas.
Los bucatini con almejas están listos para comer... ¡y hay que comérselos bien calientes!