Iba a hacer la fotografía para ilustrar el post y ¡Ohhhh, sorpresaaaaa!. La cámara no tenía batería. La comida se enfriaba y no he tenido otro remedio que tomar la imagen con el móvil. No es lo mismo, pero mejor esto que nada. A ver si no como os explicaría lo rico que estaba este plato.
Más fácil de elaborar imposible. Resultado de diez y no exagero nada.
Ingredientes
Butifarra de cerdo (200 g por persona)
Cebolla dulce
Zanahorias
Brócoli
Coliflor
Mantequilla
Aceite de oliva
Vino blanco
Sal
Azúcar (opcional)
Elegir una butifarra de carne de cerdo, elaborada con productos naturales y sin glúten.
Pinchar dos o tres veces las butifarras. Dorar a fuego medio bajo, por todos los lados, en una sartén con un poco de aceite de oliva. Retirar.
Cortar a rodajas la cebolla. Introducir en la misma sartén que habéis cocinado las butifarras. Dar unas vueltas y añadir un poco de mantequilla. Condimentar con sal. Bajar el fuego al mínimo y pochar tapado hasta que las cebollas tomen un color dorado oscuro. Remover de vez en cuando. Si las cebollas son dulces no hará falta añadir azúcar. Si no, echar una punta de cucharada. Ayudará a caramelizar el fondo.
Cuando las cebollas hayan cogido color añadir un chorrito de vino blanco de mesa. Introducir las butifarras. Reducir completamente el alcohol a fuego lento.
Hacer las verduras al vapor para que conserven todo su sabor. Si os apetece las podéis pasar por una sartén después de haber refrito unos ajos, pero también están muy ricas solo cocinadas al vapor.
Servir la butifarra sobre un lecho de verduras con la cebolla confitada por encima.
Otra receta de cerdo que lleva cebolla confitada
¡Qué aproveche!
Fuente: este post proviene de Quiero Ser Super Famosa, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado: