Una forma de que a niños y a mayores les apetezca comer verduras es rebozarlas en parmesano y hacerlas al horno, que es mucho más sano que frito. En casa ayer las hicimos para acompañar a un salmón a la plancha con salsa de mango (¡pásate a verlo pinchando aquí!).
1-2 calabacines
1 vasito de vino de parmesano en polvo
1 vasito de vino de pan rallado
1-2 cucharadas de ajo y perejil en polvo
Sal y pimienta negra
La preparación:
1. Precalentamos el horno a 220º.
2. Lavamos el calabacín y cortamos rodajas de un poco menos de medio cm. y en diagonal. Las colocamos sobre papel de horno en una rejilla de horno.
3. En un cuenco mezclamos el parmesano, el pan rallado, sal, pimienta, ajo y perejil.
4. Con una brocha o un spray, aceitamos las rodajas por una cara. Entonces cubrimos esa cara con la mezcla de parmesano y pan rallado, cuidando de que se cubran también los bordes.
5. Les damos 15 minutos en el horno. Pasado ese tiempo les damos la vuelta, aceitamos por la otra cara, cubrimos de pan rallado y parmesano y devolvemos al horno durante unos 15-20 minutos, hasta que se terminen de dorar.
Una buena idea es combinar distintas verduras. El procedimiento es el mismo que con el calabacín, pero la berenjena yo la pelo y la dejo a remojo en agua y sal durante unos 5 minutos ya cortada en rodajas. Entonces la lavo muy bien para que no quede salada y la rebozo sin necesitad apenas de aceite, ya que todavía está húmeda y el parmesano y el pan agarran bien.
¡Buen provecho!
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Bergua*
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