Compré cuatro de esos calabacines redonditos cuando los vi en el mercado, no pude evitarlo. Sabía que los rellenaría con algo, pero no sabía con qué.
Al final me decidí por una ensaladilla con langostinos cocidos y una especie de mahonesa que preparé con cúrcuma y ajo en polvo para darle carácter y a la que añadí unos pepinillos en vinagre que yo mismo preparo (aquí podéis ver cómo) y la pulpa de los propios calabacines salteada en un poco de aceite de oliva. Después de probar este relleno, decidí darle un punto de crujiente añadiéndole esta cebolla frita y como deshidratada que venden desde no hace mucho en todos los supermercados para añadir a las hamburguesas y a los perritos calientes. Por último picante, un buen chorrete de salsa de chiles.
La verdad quedó un buen plato, fresco, para tomar con una cervecita un día de calor. Queda rico y es original, os recomiendo probarlo.
El secreto del plato es dar al calabacín el punto exacto de cocción antes de rellenarlo para que quede blandito y fácil de cortar y de comer, pero no demasiado blando para que no se venga abajo o se rompa. Para conseguir un buen resultado, he ido pinchando el calabacín mientras cocía.
Os dejo con unas fotos de la preparación, la receta y el vídeo. Un saludo.
Corta un poco la base para que asienten los calabacines y corta el pedúnculo para vaciar el interior con cuidado de no romper las paredes
En esta ocasión, el relleno será una ensaladilla de langostinos cocidos
La pulpa de los calabacines la he salteado para incluirlas en el relleno
Dejo enfriar la pulpa para luego añadirla a la ensaladilla
Una vez preparada la salsa con los langostinos y con los pepinillos incorporo la pulpa salteada
Tras probar el relleno decidí añadirle cebolla frita crujiente
Por último incluí en la receta un buen chute de salsa picante que aporta mucha personalidad a la preparación
Guardé unos cuantos langostinos para decorar
El secreto de la receta es dar al calabacín el punto de cocción justo para que quede tierno pero no blando
Ingredientes:
Calabacines redondos (1 por comensal)
Langostinos (5 por comensal)
Pepinillos en vinagre -ver receta para hacerlos en casa- (1 por comensal)
Salsa mahonesa (250 gr): 1 huevo, 180 ml de aceite de girasol, 5 gr de sal, 10 ml de vinagre de vino blanco y 20 ml de aceite de oliva.
Cúrcuma (5 gr)
Ajo en polvo (5 gr)
Aceite de oliva (unas gotas para saltear la pulpa)
Salsa Tabasco® u otra similar (al gusto).
Cebolla frita crujiente (5 gr por comensal)
Preparación:
Corta un poco la base de los calabacines para que asienten. Corta el pedúnculo y retira la pulpa interior con una cucharilla con cuidado de no romper las paredes y la base de los calabacines.
Saltea la pulpa en un poco de aceite de oliva y cuando esté dorada y bien hecha deja que se enfríe.
Prepara una mahonesa a la que le añadirás la cúrcuma y el ajo en polvo.
Trocea los pepinillos y añádelos.
Pela los langostinos, trocealos y añádelos al relleno.
Incorpora también la pulpa de los calabacines salteada y la cebolla frita crujiente.
Añade salsa picante a tu gusto.
Mezcla bien todo y rellena los calabacines.
Decora con algunos trozos de langostino.