Comensales: 1
Tiempo de preparación: 35 minutos (contando los 30 minutos de reposo y refrigeración)
Utensilios necesarios: Una batidora
¡Muy buenas gastrolovers!
¿Cómo lleváis la vuelta de vacaciones?
Yo volví ayer por la noche y aún me estoy haciendo el cuerpo…
¡Tengo tantas cosas que contaros que no se por dónde empezar!
Hoy mismo me pondré manos a la obra para empezar un artículo para contaros mi experiencia de estas últimas 3 semanas en el balneario de Lanjarón.
Me han pasado cosas maravillosas que no puedo no compartir con vosotros.
Septiembre se me torna cómo el mes de las oportunidades, de nuevos proyectos, de ilusiones nuevas…
Este mes siempre es una buena opción para hacer borrón y cuenta nueva, ¿no os parece?
Bueno, antes de seguir divagando, he de confesaros que este pudding de chía es el resultado del antojazo de las gachas de avena que me hacía siempre en invierno para desayunar (los que me seguís por Instagram, sabéis que lo repetí hasta la saciedad…igual que el zumo de zanahorias, pomelo y cúrcuma.)
El caso es que desayunar algo caliente con este tiempo (aquí en Málaga aún hace “un poquito” de calores) es hacerse el mártir…y no está la cosa para eso, así que decidí hacer mis queridas gachas en versión pudding de chía.
Veréis qué fácil y rápido.
La canción que os he dejado en la banda sonora de mi cocina para que preparéis esta receta, os va a alegrar la mañana cuando os hagáis este desayuno, ¡ya me contaréis!
Para hacer este pudding de chía necesitamos los siguientes ingredienets :
– 1 vaso de leche vegetal (para esta receta va genial la de coco o la de avellanas, pero cualquier otra vale igualmente)
– 1 plátano pequeño
– 3 o 4 c/ s de semillas de chía
– 5 o 6 frambuesas
– una pizca de vainilla
– una pizca de canela
– una pizca de ralladura de limón
La preparación es tan fácil batir durante 30 segundos todos los ingredientes excepto las frambuesas, que las pondremos en el fondo de un tarrito.
Echamos nuestro pudding sobre las frambueas, tapamos el tarro y lo dejamos en la nevera durante una media hora más o menos.
Después de este tiempo, lo que parecía un batido, se habrá convertido en pudding.
Antes de consumirlo, podéis añadir cómo topping unas rodjas de plátano, unos frutos secos picados…ya es cuestión de gustos.
Cómo víes, yo he añadido un poco de mi nutella vegana…me tiene totalmente enganchada…
Espero que os guste este refrescante y nutritivo desayuno…o merienda…
Y recordad…
Las recetas están para cambiarlas
¡Un abrazo enorme gastrolovers!