Sigo en modo otoño con recetas de nuestra cocina mas tradicional como éstas ciruelas en vino tinto, que ya hacían nuestras abuelas llenando cada rincón de la casa con aromas de canela, clavo o anís estrellado y que tanto me recuerdan a mi infancia. La de hoy es una receta que podríamos denominar de "fondo de despensa", al igual que las mermeladas, las frutas en almíbar o las conservas, ya que guardadas en frío, mantienen todas su propiedades durante varias semanas.
La receta en sí no tiene mucho misterio, lo que si os recomendaría es que utilicéis unas ciruelas que no estén maduras, sino todo lo contrario tienen que estar tersas y mas bien duras y por supuesto e imprescindible un vino de buena o media calidad, no os conforméis con uno de tetra brick, y los resultados os sorprenderán.
Hace unos días la empresa Recién cogidas tuvo la gentileza de mandarme éstas ciruelas variedad Angeleno, tengo que reconocer que hacía mucho tiempo que no tenía la suerte de probar unas ciruelas tan ricas, tersas y crujientes a la vez que increíblemente dulces, una delicia directa a la mesa desde árbol, sin pasar por ningún tipo de cámara frigorífica, de ahí que el periodo de poder degustarlas sea limitado. Si tenéis la posibilidad de probarlas, no lo dudéis.
En las fotos Cocotte Evolution Le Creuset
CIRUELAS EN VINO TINTO
INGREDIENTES:
1 Kg. Ciruelas
1 L. Vino tinto de buena calidad
220 g. Azúcar
1 Clavo de olor
1 Palo de canela
1 Anís estrellado
Piel de naranja
ELABORACIÓN:En una cazuela de fondo grueso ponemos el vino, el azúcar, el clavo de olor, la canela, el anís estrellado y la piel de naranja y dejamos hervir a fuego fuerte unos 7 u 8 minutos para que el vino tome todos los aromas de los ingredientes añadidos.
Pasado éste tiempo, lavamos bien las ciruelas y sumergimos en el vino aromatizado, bajamos el fuego y dejamos cocer alrededor de 7 minutos, dependiendo de las ciruelas elegidas, no debemos dejarlas muy blandas o se romperán.
Retiramos las ciruelas del vino y dejamos cocer éste otros 5 minutos más para que el líquido se concentre un poquito más y pierda el alcohol.
Si queremos conservarlas, ponemos las ciruelas en frascos esterilizados previamente, cubrimos con el almíbar de vino, cerramos bien y ponemos el frasco boca abajo para que haga el vacío. Conservamos en un lugar oscuro y seco.