En esta nota descubriremos qué características la hacen tan especial, cómo se elabora, sus diferencias con la crema pastelera, su origen, así como consejos para su preparación. Además, al final les dejamos una receta completa para que puedan disfrutar de esta deliciosa creación.
Tabla de contenidos
Sobre la crema inglesa
Origen de la receta
¿Cómo se hace?
Crema inglesa y crema pastelera: Parientes cercanas
5 toques de sabor para la crema inglesa
¿Qué otro nombre se le da a la crema inglesa?
4 consejos a la hora de prepararla
Receta de crema inglesa
Ingredientes
Como hacer crema inglesa paso a paso
Sobre la crema inglesa
La crema inglesa se caracteriza por su consistencia suave y sedosa, similar a una salsa espesa. Su color es amarillo pálido y su sabor es dulce y delicado, con una nota de vainilla.Esta preparación es muy versátil, ya que puede utilizarse como acompañamiento para tartas, pasteles, frutas o simplemente servirse en copas como postre individual.
Su textura aterciopelada y su sabor suave la convierten en un acompañamiento ideal para resaltar otros sabores sin opacarlos.
Origen de la receta
Esta crema tiene sus raíces en la cocina inglesa tradicional y ha sido parte de la gastronomía británica desde hace siglos. Se dice que su origen se remonta a la Edad Media, cuando los cocineros ingleses comenzaron a utilizar huevos y leche para elaborar salsas dulces.Esta crema es apreciada y consumida en todo el mundo. En la cocina británica, es un acompañamiento clásico para el famoso “pudding” inglés, mientras que en la cocina francesa se utiliza para acompañar postres como el “crème brûlée“.
En algunos países latinoamericanos, también se lo conoce como “natilla” y se sirve como postre individual o se utiliza como base para otros postres tradicionales.
¿Cómo se hace?
Esta crema se elabora a partir de ingredientes que solemos tener en casa, como leche, azúcar, yemas de huevo y vainilla. Es una preparación sencilla pero hay que controlar algunos detalles, como evitar que se cuajen las yemas al mezclar con la leche caliente, o no dejar de remover hasta obtener la consistencia de la crema, evitando que llegue al hervor.Crema inglesa y crema pastelera: Parientes cercanas
A menudo se confunde a esta crema con la crema pastelera debido a su apariencia similar. Si bien ambas se preparan con leche, azúcar y yemas de huevo, la crema pastelera tiene una textura más consistente, ya que incluye también harina o almidón para lograr una crema más espesa.Esa consistencia hace que la crema pastelera sea más adecuada para rellenos de pasteles (tortas) y tartas, ya que mantiene mejor su forma. Por otro lado, la crema inglesa es más ligera y se utiliza principalmente como salsa o acompañamiento.
5 toques de sabor para la crema inglesa
Vainilla: La vainilla es el aroma clásico de la crema inglesa. Se pueden utilizar vainas de vainilla fresca o un buen extracto de vainilla.
Cítricos: Agregar ralladura de limón, o de naranja puede darle un toque fresco y aromático a la crema inglesa.
Especias: Se pueden incorporar especias como canela, nuez moscada o cardamomo para darle un sabor especiado y perfumado. Agregar las especias durante la cocción y retirarlas antes de servir la crema.
Licor: Algunos licores pueden complementar muy bien con la crema inglesa. Unas gotas de licor de naranja, de café o de almendra aportan un toque extra de sabor y aroma.
Chocolate: El chocolate no defrauda, se puede incorporar chocolate rallado o cacao en polvo durante la cocción de la crema inglesa para dejarla con un sabor y aroma simplemente irresistible.
¿Qué otro nombre se le da a la crema inglesa?
La crema inglesa es conocida por varios nombres en diferentes países y contextos gastronómicos. Es importante tener en cuenta que, si bien estos nombres pueden utilizarse como sinónimos, en algunos casos pueden existir pequeñas diferencias en la preparación o los ingredientes utilizados.Crème anglaise: Este es el nombre francés de la crema inglesa. Aunque se traduce literalmente como “crema inglesa”, es común utilizar este término en contextos culinarios y recetas de origen francés.
Salsa inglesa: En algunos lugares, especialmente en América Latina, se le puede llamar “salsa inglesa”. Esto se debe a que la crema inglesa se asemeja a una salsa suave y se utiliza como tal para acompañar postres.
Custard: En el mundo anglosajón, especialmente en el Reino Unido, se utiliza el término “custard” para referirse a la crema inglesa. Aunque este nombre también se utiliza para otras preparaciones a base de huevo y leche, como la crema pastelera.
4 consejos a la hora de prepararla
Utilizar una vaina de vainilla de buena calidad para obtener un sabor más intenso y auténtico. También se puede utilizar extracto de vainilla, aunque el sabor será diferente.
No dejar que la crema hierva durante la cocción, ya que esto podría provocar la coagulación de las yemas y arruinar la textura final.
Para asegurarse de que la crema no tenga grumos, colar la mezcla antes de llevarla al fuego y después de cocinarla.
Enfriar la crema rápidamente sumergiendo el recipiente en un baño de agua fría o hielos y revolviendo de vez en cuando. Esto evitará que se forme una capa de nata (crema de leche) en la superficie.
Receta de crema inglesa
Rinde: 4 porcionesTiempo de preparación: 30 minutos
Ingredientes
500 ml de leche
4 yemas de huevo
100 g de azúcar
1 vaina de vainilla (o unas gotas de extracto de vainilla)
Como hacer crema inglesa paso a paso
En una cacerola, calentar la leche junto con la vaina de vainilla abierta a lo largo y las semillas de la vaina raspadas.
En un recipiente aparte, batir las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla homogénea y ligeramente espumosa.
Verter la leche caliente sobre la mezcla de yemas y azúcar, removiendo constantemente. Llevar nuevamente la preparación a la cacerola y cocinar a fuego lento, removiendo constantemente hasta que la crema espese ligeramente y cubra la parte posterior de una cuchara. No dejar que hierva.
Retirar la cacerola del fuego y colar la crema para eliminar posibles grumos.
Transferir la crema a un recipiente y enfriar rápidamente sumergiéndolo en un baño maría invertido (bol con hielos y agua fría). Seguir revolviendo hasta que tome temperatura ambiente. Una vez fría refrigerar en un recipiente con tapa hasta el momento de servir. Usarla como acompañamiento de postres o disfrutarla sola.